El gobierno municipal de Lalín acusa al Partido Popular de poner en serio riesgo la ejecución de los proyectos que serán financiados con cargo al remanente de tesorería, entre los que se encuentran el plan de mejora de accesos a núcleos rurales, la reposición de una pérgola en el Paseo do Pontiñas o la finalización del aparcamiento en el Pazo de Liñares. Todas estas propuestas, junto con algunas otras, estaban incluidas en el expediente de crédito extraordinario al que se dio luz verde en el pleno del pasado día 8, después de que la oposición rechazase su aprobación en el pleno del 16 de agosto.

Para el ejecutivo existe una evidente estrategia de dilación que provocará que, en casos, sea casi imposible cumplir los plazos legales obligatorios para la adjudicación y ejecución de las obras. Insiste además que esta situación puede conllevar una consecuencia todavía más negativa: la inversión que no se lleve a cabo con cargo a esa partida no computará en la regla de gasto de este ejercicio y tampoco se podrá incorporar al año que viene. "A consecuencia de la irresponsabilidad del PP y de la inopercancia del concejal tránsfuga, el Concello verá reducida su capacidad de gasto e inversión en favor de los ciudadanos, no solo este año, sino también el siguiente". El gobierno reitera que se está topando con una "imprudente maniobra de bloqueo político y administrativo, que está motivada por intereses partidistas y que deja completamente de lado los intereses generales de los vecinos de Lalín". Estima que la oposición, en su ánimo de intentar desgastar al gobierno, "empleando como cómplice y colaborador necesario a un tránsfuga el PP demuestra una clara voluntad de escrúpulos que ni siquiera se detiene ante los graves perjuicios que le va a ocasionar a la administración pública y a los vecinos de Lalín, entre ellos muchos votantes del Partido Popular".

Esta es la conclusión a la que llega el ejecutivo local después de que el BOP publicase anteayer la aprobación inicial y apertura del trámite de exposición pública de la partida con la que se van a financiar los proyectos. Ahora se abre un plazo e alegación de 15 días y en el mejor de los casos la aprobación definitiva no llegaría hasta la segunda semana de octubre. Después habrá que esperar una semana más para que el boletín provincial de luz verde a la licitación de las actuaciones programadas. Tras esta última publicación habrá que esperar como mínimo otros 26 días para la recepción de las ofertas de las empresas concursantes. Apurando al máximo el procedimiento de contratación, las obras estarían adjudicadas y podrían empezar aproximadamente en la primera semana de diciembre. Pero el ejecutivo local recalca que teniendo en cuenta que el plazo de ejecución de las obras es de un mes, que en diciembre hay tres días festivos y que las condiciones meteorológicas no suelen ser las más favorables, es posible que alguno de estos trabajos no pueda estar finalizados en tiempo y plazo.

Por eso desde el gobierno municipal se lamenta que pese a las múltiples advertencias realizadas en pleno por técnicos el pasado 16 de agosto, el PP decidió posponer la aprobación de estas obras "de una manera que ahora se demuestra temeraria y contraria a los intereses vecinales". "Todo esto se suma a la negativa de los populares y del tránsfuga a aprobar otros proyectos de interés general que, previsiblemente tampoco se podrán llevar a cabo".