La construcción del Centro de Alta Resolución (CAR) de Lalín fue uno de los primeros proyectos que reivindicó el grupo de gobierno. Tras unos meses se acercaron posturas con la Consellería de Sanidade y se celebró una reunión en Santiago en la que participó el titular de este departamento autonómico, Jesús Vázquez; mandatario lalinense, Rafael Cuiña, y el concejal Nicolás González Casares. En aquel encuentro, del pasado mes de mayo, la consellería se había marcado un plazo de dos meses para "redefinir" el proyecto del complejo sanitario. Desde aquella fecha, según el ejecutivo local, no se ha producido el más mínimo avance.

Ante esta situación, tanto Cuiña como el edil de Saúde Pública, González Casares, acusan a la consellería de no haber hecho nada al respecto, dando a entender en nulo interés de la Xunta por desbloquear la puesta en marcha de una infraestructura sanitaria por la que se aguarda desde hace más de una década. "Es una clara falta de respeto institucional, nosotros nunca lo haríamos, porque a quién se ningunea no es a este gobierno sino al pueblo de Lalín", exclamó el alcalde. Casares recordó que el ayuntamiento -ya en la etapa del anterior gobierno- se encargó de poner los terrenos a disposición de Sanidade para comenzar el proyecto. Pero además, ya en este mandato, todos los grupos políticos locales aprobaron por unanimidad una moción en la que se instaba al gobierno gallego a avanzar en la puesta en marcha del CAR. Esa iniciativa plenaria fue refrendada en el mes de abril. González Casares indicó que poco después se percibió con sorpresa una reunión en la que el conselleiro de Sanidade recibió al portavoz del Partido Popular, José Crespo, y a una concejala de este partido de la oposición. "No sabemos para qué sirvió aquella reunión", dijo. También en mayo, en el encuentro del mandatario y del teniente de alcalde con Vázquez Almuiña (el 12 de mayo) se habría trasladado a los representantes del ejecutivo local que en dos meses estaría lista "la redefinición del proyecto del CAR". "Se habló de que se redactaría un plan funcional y que estaría más pensado para pacientes crónicos que agudos". Entonces, según Casares, la consellería habría asegurado que transcurridos esos dos meses se convocaría al alcalde a una reunión para valorar posibles avances o incluso conocer ya por donde pasaría esa redefinición del proyecto. "Cinco meses después observamos que aquello era papel mojado y un nuevo engaño a los lalinenses de la consellería con la complicidad de Crespo y del PP", declaró Casares.

Ambulatorio

El edil también citó mejoras comprometidas para el centro de salud actual, como la implantación del servicio de hemodiálisis, atención domiciliaria a pacientes o atajar la lista de espera en fisioterapia. Frente a estas propuestas sin concretar, el gobierno local solo ve un empeoramiento en la calidad asistencial con la supresión durante este verano del servicio de radiología por las tardes. También cuestiona que los anunciados 30.000 euros para mejoras en el ambulatorio no se van a subsanar carencias de espacios o las goteras que existentes en el edificio. "A lo mejor, como ahora estamos de nuevo en época electoral, sacan un conejo de la chistera. Además, que el PP saque pecho en temas como la sanidad es una desfachatez", recalcó González Casares. El responsable municipal de Saúde Pública cree que la lista de espera en fisioterapia sí bajó algo. Cabe recordar que los propios sindicatos denunciaron en marzo que había 428 pacientes de la comarca pendientes de atención en esta especialidad.