A pocos días del arranque de la campaña para las elecciones autonómicas, el Partido Popular de Pontevedra realizó ayer una "exhibición de músculo" en Lalín para movilizar a sus bases ante el "difícil" reto de refrendar su gobierno. "Era más fácil conseguir la mayoría absoluta en Lalín 2015 que ahora en Galicia", admitió el candidato a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, para alertar a los presentes contra el exceso de confianza. Pronunció estas palabras durante un homenaje a más de 500 exalcaldes y exediles de la provincia en la Carballeira do Rodo en el que los actuales dirigentes del partido se enfundaron delantales para servir el ágape a sus predecesores.

El acto comenzó con una bienvenida a cargo del senador y portavoz municipal del PP, José Crespo, que subrayó la unidad de la "familia popular" frente a la "carrera de galgos" entre Podemos y En Marea, el "totum revolutum" del PSdeG y la "muerte por inanición" del BNG. En todo caso, advirtió a los asistentes de que "no hay que confiarse". "A nosotros nos pasó hace un año por doscientos míseros votos", recordó el exalcalde lalinense. "Si nos dormimos en los laureles, puede ocurrir que por un feixiño de votos no tengamos 38 escaños y se unan todos contra nosotros, que sería una desgracia para Galicia", sentenció Crespo.

Exhibición de músculo

El conselleiro de Educación e Cultura, Román Rodríguez, puso a los presentes como "ejemplo de trabajo" y de una "formidable red social que llega a todos los rincones" de Galicia. El exedil lalinense situó a Galicia como "hecho diferencial en España", un "pequeño milagro en la época más difícil". Nidia Arévalo, alcaldesa de Mos, presentó a uno de sus antecesores, Justo González Ballesta, que habló en nombre de los invitados y tildó de "idea luminosa reunir a la vieja guardia", porque "la base es no perder lo que tenemos". "Echábamos de menos un acto como este, de exhibición de músculo", añadió Ballesta.

En la misma línea se pronunció Alfonso Rueda: "Lo que temen de verdad nuestros rivales es la infantería del partido, a quien da todo a cambio de nada, y esos sois todos vosotros". "Todo el que da el testigo sigue ahí, y esa es la fuerza que tenemos siempre", dijo el presidente de los populares pontevedreses tras citar a sus predecesores Mariano Rajoy, Xosé Cuiña y Rafael Louzán. "Con todos, con trabajo y con toda la humildad, la maquinaria del PP ya está en marcha", anunció. "Hoy parece que tener sentido común y ganar unas elecciones, tener el apoyo de las personas una y otra vez, ya no vale para nada y lo único que tiene mérito es acabar de llegar y decir disparates", apuntó Rueda, que presumió de que el PP tiene "el mejor candidato, dicho por nosotros y por ellos", pero "no es suficiente". "Por encima de todo hace falta lo que hoy está aquí, la unión que nos caracteriza y trabajar todos juntos para conseguir esa mayoría absoluta". Rueda habló de su partido como "una gran familia por encima de todo", incluso de "desavenencias" como las que en su día protagonizó José Castro, exalcalde de Ponteareas, a quien Feijóo devolvió ayer su carné de afiliado al PP. "A pesar de las vicisitudes nunca dejé de apoyar al Partido Popular", aseguró un emocionado Castro, que tuvo un agradecimiento para "el sacrificio" de "las mujeres de los políticos".

Feijóo actualizó el discurso y se refirió también a "los maridos de las políticas". Parafraseando a Manuel Fraga, comparó la salud del PP con la de "un viejo carballo" y lo definió como "el partido de Galicia, de la tierra y de la gente". El presidente de la Xunta apeló a los valores democráticos para que "en Galicia haya el gobierno que salga de las urnas, no de los despachos" y cuestionó un tópico: "Los gallegos sabemos lo que queremos, solo hay que recontar los votos después de cada elección -apuntó-. Ahí nunca decimos 'depende'". Consciente de que "es muy difícil conseguir la mayoría absoluta", se mostró convencido de lograrla con "el esfuerzo de todos". Porque, frente a la dualidad de un gobierno "a la valenciana" o "a la madrileña" -expuesta por Albert Rivera (Ciudadanos) en un acto ayer en A Coruña-, Feijóo proclamó su apuesta por "un gobierno a la gallega, de mayoría, porque Galicia es nuestro único objetivo".