La residencia de mayores de A Estrada recibió parte de la pesca decomisada por agentes medioambientales del Servizo de Conservación da Natureza de la Xunta de Galicia, cuya Consellería de Medio Ambiente continúa impulsando la lucha contra el furtivismo en el río Ulla. Los pasados 11 y 24 de agosto los agentes detectaron pescas no autorizadas en este curso fluvial.

Desde el citado departamento autonómico se incide en que el Ulla es un río con una importante variedad de peces, siendo algunos de ellos objeto de aprovechamiento profesional -en al desembocadura- y recreativo (en su curso). Para regular estas actividades existen normas destinadas a garantizar la sostenibilidad y conservación de las especies. Los gentes medioambientales de Conservación da Natureza realizan labores de vigilancia al objeto de detectar posibles incumplimientos de dichas normas.

Así, el pasado 11 de agosto estos profesionales detectaron una embarcación pescando en una zona vedada con artes no autorizadas. Se explica que en aquel momento tenían en su poder 17 kilos de anguilas, dos lubinas, cuatro lenguados y 13 cangrejos, que fueron devueltos vivos al agua.

Posteriormente, el miércoles 25 de agosto los agentes sorprendieron a un pescador deportivo pescando salmón en el coto de Ximonde. Cabe recordar que la pesca de salmón está vedada desde que en el mes de julio se alcanzó el cupo de 60 ejemplares autorizado en este río en la orden anual de pesca fluvial y que únicamente está permitida hasta al mes de septiembre la pesca sin muerte. Fuentes de la consellería concretan que el salmón decomisado pesaba casi cinco kilos y fue entregado a la residencia de mayores de A Estrada.

En los dos casos descritos se iniciaron los correspondientes procedimientos sancionadores, después de la presentación de las denuncias realizadas por los agentes en la jefatura territorial de la Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio de Pontevedra.