La cooperativa láctea ICOS, ubicada en Silleda en la carretera en dirección a la parroquia de Siador, fue objetivo de los ladrones en la madrugada de ayer. Los amigos del ajeno se hicieron con un botín de 500 euros en efectivo y causaron considerables destrozos en el sistema informático, por lo que las pérdidas, todavía sin contabilizar, son mayores.

Las cámaras de seguridad detallan que los ladrones accedieron a la empresa alrededor de la una de la madrugada. Cuando saltó la alarma y alertó a uno de los trabajadores este se desplazó al lugar pero ya se encontró con el sitio vacío. "Mi compañero llegó sobre la 01.20 horas y ya no había nadie, así que fue algo rápido", señala otro de los empleados. Al parecer, las cámaras de seguridad grabaron a tres individuos, aunque su identificación resultará complicada ya que iban completamente tapados.

Para acceder al interior de la cooperativa los ladrones rompieron parte de la pared trasera. "Es de chapa y realizaron un agujero para entrar, y para eso lo más seguro es que utilizasen una radial o una tenaza grande", informan desde la empresa. Asimismo, consideran por las grabaciones de las cámaras que los individuos conocían el lugar "ya que fueron directamente a sitios estratégicos en dónde podía haber algo, o lo adivinaron fácilmente, o sino es muy probable que conociesen la distribución de las instalaciones, y también sabían del servidor de las cámaras de grabación", señala un trabajador.

Los saqueadores, tras apenas diez o quince minutos en el interior de ICOS, se hicieron con un botín en efectivo de 500 euros, además de ocasionar cuantiosos destrozos. "Sobre todo provocaron daños en material informático, quedaron varios ordenadores afectados, pero todavía falta por concretar todo exactamente", comunica personal de la empresa saqueada.

Por este motivo, las pérdidas serán mayores. Los trabajadores afirman que nadie vio ni escuchó nada. "Al ser de madrugada es difícil porque esto está apartado, por lo que nadie puede aportar información". Por este motivo, al parecer los ladrones pudieron acometer su objetivo sin ningún tipo de imprevisto.

Buscan huellas

Miembros de la Guardia Civil y la Policía Científica se desplazaron ayer por la mañana para inspeccionar el lugar de los hechos, en dónde recogieron posibles huellas para tratar de dar con los ladrones.

Este es el segundo robo a una empresa que se produce en Silleda de lo que llevamos de época estival. En junio la perjudicada fue la Clínica de Fisioterapia Silleda, en la calle María Colmeiro del casco urbano de Trasdeza, que en este casco se llevaron 200 euros de la caja registradora, pero no provocaron daños en el mobiliario ni en el resto del local, y aquí, accedieron al interior forzando el bombín de la puerta.

Ante estas situaciones los empresarios de la zona reclamaban más vigilancia para tratar de evitar que sus negocios sufran importantes pérdidas y destrozos considerables.