Una fuerte tormenta eléctrica, que comenzó el miércoles por la tarde, afectó a toda Galicia, y en Deza no fue para menos. No pilló por sorpresa a nadie ya que las altas temperaturas de estos días, que en la comarca sobrepasaron los 30 grados, ya la anunciaban. Fue a partir de la medianoche cuando se hizo notar y duró buena parte de la madrugada acompañada de fuertes precipitaciones y granizo, que provocaron importantes inundaciones, como fue el caso de terrazas de edificios en la capital dezana. El fenómeno meteorológico también causó apagones de luz que propiciaron considerables destrozos en diversos electrodomésticos, así como problemas en la línea telefónica.

Lalín y Agolada fueron los municipios dezanos que registraron mayor cantidad de relámpagos, seguidos de Vila de Cruces y Dozón, mientras que Silleda y Rodeiro fueron los menos afectados. Sin embargo, Dozón fue el concello más perjudicado a consecuencia de los apagones. De hecho, y tal como apuntó un vecino de la zona, estuvieron 16 horas sin luz eléctrica. Concretamente en la parroquia de Bidueiros y en el lugar de Cubelos permanecieron sin electricidad desde las 23.30 del miércoles hasta las 16.00 horas de ayer, pero en general esta situación la padecieron en todo el ayuntamiento. "Debemos decir que en todo momento los técnicos de Fenosa trabajaron para solucionar el problema lo antes posible", apunta un lugareño que debido a la falta de electricidad se le averiaron varios electrodomésticos, entre ellos el congelador, y las pérdidas alcanzan los 600 euros.

Asimismo, destacan que ayer tuvieron problemas en la señal de los teléfonos móviles y que unos de los más afectados fueron vecinos enfermos que se encuentran encamados, al no poder usar sus camas eléctricas.

En Vila de Cruces los apagones se produjeron especialmente en las parroquias de Piloño y de Salgueiros, tal y como apuntó un miembro de Protección Civil. Al parecer estuvieron sin luz desde las 22.00 horas del miércoles hasta las 02.30 horas de ayer. Al parecer un rayo provocó desperfectos en un transformador ubicado entre ambos lugares. Asimismo, en varias viviendas de la parroquia de Brandariz se estropearon los teléfonos fijos.

Aseguradoras

Además de los técnicos de las compañías de luz y de la telefonía, el personal de las aseguradoras de la comarca vieron incrementado su trabajo ayer debido a las continuas llamadas para alertar de averías en el hogar y buscar cobertura de sus seguros contratados. Solo durante la mañana la oficina de Mapfre de Lalín registró quince partes de averías. "Pero esperamos que a lo largo del día y en los tres siguientes se incrementen, porque la gente no denuncia inmediatamente", apunta una de las trabajadoras de la aseguradora.

Entre las averías que contabilizaron destacan las producidas en portalones de garajes, vitrocerámicas, cámaras de grabación de empresas, ordenadores, impresoras, antenas... "En Lalín los hogares y las empresas fueron los más afectados, mientras que en Rodeiro muchos tuvieron problemas en las salas de ordeño", señalan desde Mapfre. Asimismo, destacaron que en Dozón, debido a la falta de luz durante tantas horas, muchos ganaderos optaron por comprar generadores para poder ordeñar el ganado.

Otra de las consecuencias, fue un incendio forestal que se inició ayer por la tarde en la parroquia de O Sisto, en Dozón. Según las primeras estimaciones de la Consellería do Medio Rural el fuego comenzó a las 14.56 horas y quedó extinguido a las 16.45 horas y ardieron 0,03 hectáreas de superficie arbolada. En las tareas de extinción participaron un agente, dos brigadas y dos motobombas. También, cooperaron miembros de Emerxencias Lalín con una motobomba. Al parecer el motivo del incendio pudo deberse a la caída de un rayo que calentó la tierra provocando el brote del fuego.

Por otra parte, la parroquia lalinense de Botos también se vio afectada por la fuerte tormenta. En este caso, la comisión de fiestas del lugar se vio obligada a suspender las actuaciones de su primer día de fiestas en honor a San Bartolomeu, debido a que carecían de carpa para la ocasión. "La orquesta Fania vino y montó su palco, porque después de comenzar la tormenta por la tarde, parecía que iba a parar, pero a partir de las 23.30 la cosa se complicó y por eso decidimos suspenderla, y menos mal, porque justo cayó un trueno detrás del escenario de esa agrupación", comunicó José Cuñarro, presidente de la comisión de fiestas de Botos.

Según Meteogalicia, para la jornada de hoy se mantendrá la inestabilidad de los días anteriores sobre toda Galicia. Los cielos estarán más anublados cuanto más al norte, con posibilidad de chubascos que serán más probables durante la tarde, y en la comarca podrán venir acompañados de tormentas. Las temperaturas, tanto mínimas coma máximas, estarán sin cambios significativos.