El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en Lalín se disparó en once años un 171%. Mientras el precio real de mercado de la mayor parte de las propiedades inmuebles ha bajado y tampoco hay demanda para colocar estos pisos en venta, la contribución no ha parado de crecer. La realidad es así y de este modo se puede comprobar si cogemos los recibos de un piso Un piso de unos 140 m2 situado en calles como Principal o Joaquín Loriga que en 2003 pagaba de contribución 123 euros, pasó diez años después pasado a abonar casi 336. Pero además es que el valor de un hogar como el mencionado con anterioridad pasó de los 24.700 euros hasta los 67.150. Otro ejemplo, en relación al alza del IBI en Lalín, es por ejemplo un piso en la rúa da Ponte. Los propietarios de un inmueble de 120 m2 pagaban de contribución antes de la ponencia de valores unos 97 euros y, tras una subida del 150%, pasaron a abonar 242. Asimismo, el valor catastral subió desde los 19.400 euros hasta los cerca de 48.500.

Por otro lado, las casas construidas en diseminado - no se benefician de la bonificación del 60%- también han visto aumentada su carga fiscal a satisfacer al ayuntamiento. En estos mismos diez años el recibo de un hogar de 230 metros cuadrados pasó de 228 a 415 euros anuales. Una vivienda más grande, de unos 450 metros, y que pagaba de IBI hace ahora doce años 412 euros llegó a abonar una década después hasta 750.