Los trabajos de pintado de la señalización horizontal en el tramo afectado por la segunda fase de reforma del transitado vial PO-2017 -Liñares-Valboa- culminaron a principios de esta semana. Así lo confirmaron fuentes vecinales, que también explicaron que todavía falta por instalar la señalización vertical del tramo, en el que la empresa adjudicataria de las obras -Narom- ejecutó en las últimas semanas de julio trabajos de reposición de la mayoría de las afecciones sin resolver que habían quedado tras la reforma y que ya fueron denunciadas por la Asociación de Veciños Decoita de Riobó ante la presidenta de la Diputación Provincial de Pontevedra, Carmela Silva, mediante un escrito remitido a principios de julio por el presidente del colectivo, Gonzalo Figueiras.

Cabe recordar que en dicha misiva se le transmitía el "profundo malestar" existente entre los vecinos por la falta de reposición de las afecciones a sus propiedades que se produjeron por las obras. La empresa había prometido "dejar las cosas como estaban" si los vecinos cedían los terrenos sin impedimentos y se encontraban con problemas no resueltos, fundamentalmente en accesos a viviendas de los lugares de O Río y Os Basteiros. El propio alcalde había contactado con la empresa y con la Diputación después de la queja vecinal y había señalado que la Diputación había hecho inventario de las afecciones sin resolver y había dado orden de reposición. Y, según confirmó ayer Figueiras, la gran mayoría de esas afecciones ya han sido resueltas. Si queda alguna pendiente, apuntó, pueden ser "flecos" pero agregó que los vecinos confían en que las administraciones provincial y local estén vigilantes para que las obras no se recepcionen hasta que todas las deficiencias que apuntaban los vecinos están resueltas.

Por su parte, el alcalde de barrio de Oca, José Manuel Pereiro, confirmó que también en Oca las obras están prácticamente concluidas, de acuerdo con lo que se había acordado. Para culminar la actuación, Oca confía en que el Concello le envíe un nuevo caseto para la parada del autobús. De momento, se ha instalado en ese punto el viejo de manera provisional hasta que la administración local pueda aportar uno nuevo.

Por otra parte, Pereiro y Figueiras informaron de que se acaban de remitir a la Diputación y a la Xunta sendos escritos en los que se les pide que revisen los taludes de tierra que quedan en la zona, que no han sido protegidos con muros de contención. Los propietarios de los terrenos en cuestión -junto a la carretera y próximo al río- quieren dejar claro que si se producen desprendimientos por el agua no es cu.lpa de los dueños de los predios.