El portavoz del Partido Popular de Silleda, José Luis Espiño, lamenta la actitud del alcalde, Manuel Cuiña, en el conflicto del secretario municipal al no responder a las preguntas de su grupo. "Es una falta de respeto a todos los vecinos que se niegue a dar la información solicitada y se escude en que es un tribunal el que tiene que decidir la cuestión", valora el edil. A su juicio, "es el misterio que se trae lo que hace desconfiar, pues si diera la cara desde el primer momento, en el pleno o en una junta de portavoces, para explicar lo ocurrido, la situación en la que se encuentra el Concello y las decisiones adoptadas que se pudieran ver afectadas, no habría que preguntarle nada".

Los populares recuerdan que es su deber como oposición ejercer el control del gobierno, por mucho que no sea "cómodo" para el regidor, dado su "talante". Añaden que "no es cuestión de bandos", sino de "legalidad", de "ver que pasó para intentar solucionar un problema que afecta a todos los silledenses y pedir explicaciones a quien las tenga que dar". En todo caso, interpretan que "el nerviosismo" de Cuiña "no parece anticipar nada bueno".

Desde el PP niegan que en la redacción de las preguntas que formuló en el pleno interviniese la Dirección Xeral de Administración Local, contra la que el Concello interpuso un contencioso por inacción a la hora de nombrar como secretario a Manuel Quintáns. "Seguramente para Cuiña es novedoso que la gente tome decisiones sin tener terceras personas detrás diciéndole lo que tienen que hacer, pero no todos necesitamos consejos", concluye Espiño. Y alega que si el alcalde está involucrado será por sus decisiones, no por las preguntas que pueda hacer el PP.