El Concello de Cerdedo pondrá en marcha el Plan Cerdedo Biodepura para solventar las importantes deficiencias de funcionamiento que, más de diez años después de su implantación, presentan instalaciones de depuración creadas a inicitiva del equipo de gobierno existente en los primeros años de la década de los noventa. Así lo indicaron fuentes municipales, que avanzaron que el objetivo del Plan Biodepura -que ascenderá a 250.000 euros- es mejorar el funcionamiento y la integración paisajística de siete de las actuales depuradoras cerdedenses, incluyendo entre ellas a la Estación Depuradora de Augas Residuais (EDAR) del núcleo urbano de Cerdedo (con una inversión próxima a los 200.000 euros) , así como la retirada de las instalaciones de depuración existentes en los lugares de Outeiro-Os Castros (Quireza) y de Tomonde.

En el caso de estos dos sistemas de depuración, actualmente sus instalaciones presentan un estado muy avanzado de oxidación. Presentan tecnologías obsoletas y "muchos problemas operativos que impiden cumplir con los objetivos de vertido y protección de las aguas". Es por ello que el gobierno local que preside el alcalde José Balseiros ha decidido apostar por la sustitución de ambos sistemas por sendos humedales artificiales.

Esta decisión entronca con la apuesta del ejecutivo cerdedense por las "tecnologías extensivas" de depuración. Se trata de tecnologías no convencionales o de bajo coste que, según fuentes municipales, "en los últimos años han sido ya probadas con éxito en muchos países europeos". Agrega que "en esencia, el funcionamiento de un sistema de depuración de bajo coste y de un sistema convencional es el mismo". La diferencia estriba en "la velocidad de los procesos de depuración" dado que "en los sistemas de bajo coste se trabaja a la velocidad natural propia de los procesos, sin apenas gasto energético ni de reactivos". Este tipo de sistemas buscan "imitar los procesos de depuración que se dan en la naturaleza".

Y precisamente por ello el Concello apostará por "humedales artificiales subsuperficiales", que "reproducen de manera controlada los procesos de depuración que ocurren normalmente en los humedales naturales". Añade que conllevan "una muy buena integración en el entorno y permiten incluso la creación de zonas húmedas con elevado valor ambiental". Defiende que son "sistemas totalmente naturales" que se logran sin añadir productos químicos de manera habitual y que producen "muy pocos lodos, lo cual abarata la gestión". De hecho, su mantenimiento "es muy escaso, sin dependencia tecnológica y reduciéndose a comprobaciones periódicas". Aclara que "no genera olores ni insectos ya que el agua circula por el interior del humedad".

Consciente de que "muchos al principio pueden verlo como una tecnología simple ya que apenas cuenta con obra civil" señala que "lo cierto es que es una tecnología que se ha probado con éxito ya para depurar aguas industriales" por la que en Europa se lleva apostando "más de una década".

Desde la administración local se hace notar que cuando a principios de los 90 el entonces gobierno local decidió instalar las depuradoras que ahora dan problemas lo hizo sin "estudios previos adecuados de caudales, carga contaminante, alternativas posibles" por la "falta de técnicos cualificados" y a que era una responsabilidad de las institucionessupamunicipales. "Como resultado se construyeron instalaciones poco o nada adecuadas para la realidad de nuestro territorio y de nuestras aguas residuales", que necesitan "mantenimiento, limpiezas y gestión de lodos". Además, alguna consume "mucha energía" y necesita "personal especializado para operar, lo que encarece y dificulta la depuración de las aguas". La gran dispersión poblacional llevó a concellos como Cerdedo a instalar pequeños depuradoras en lugares que apenas superaban los 100 habitantes pero hoy el Concello tiene "pocos recursos económicos y personal" pero debe "atender las obligaciones legales en materia de saneamiento", asegurando además un rendimiento que asegure que cumple objetivos de calidad de vertido para no contaminar las masas de agua.