La celebración del San Juan con hoguera implica el cumplimiento de unas normas de seguridad que, en el caso de Lalín son: el volumen del material combustible no podrá superar los 4 metros de diámetro ni los 3 de altura La separación entre el fuego y los edificios, árboles y demás objetos que puedan resultar dañados, será de un mínimo de 12 metros, con especial cuidado en no encenderlas bajo tendidos eléctricos o telefónicos, así como que en las cercanías se almacenen productos inflamables.

Asimismo, está prohibida la quema de neumáticos, plásticos, aceites o sustancias que desprendan gases tóxicos o sprays, aunque estén vacíos. En los casos en que las hogueras se hagan en terrenos públicos, la organización se encargará de proteger el pavimento con una capa de arena de 10 centímetros en toda la superficie, que deberá ser retirada una vez terminada la actividad. Además de esto, al finalizar la celebración y antes de abandonar totalmente el lugar, los responsables de la organización de cada fiesta se encargarán de que las cenizas de las hogueras queden totalmente apagadas para que no suponga ningún tipo de peligro.