La junta de gobierno de A Estrada adjudicó ayer a la empresa Construcciones Cuntis la obra de reforma de la Praza do Mercado, una actuación ideada para completar el acondicionamiento del entorno del Novo Mercado, después de la humanización acometida en las calles Waldo Álvarez Ínsua y Padrón y tras la retirada de la nave provisional que, durante las obras de reforma del mercado municipal, albergó los puestos de los placeros.

Las obras tendrán un presupuesto de 54.000 euros y un plazo de ejecución de dos meses. Al ser preguntado por esta cuestión, el alcalde estradense, José López, explicó al mediodía de ayer que los trabajos arrancarán después de las fiestas patronales. Ello hace pensar en que la reforma pueda verse completada durante el próximo mes de septiembre.

Con esta nueva remodelación esta plaza pública recuperará la pérgola que le fue retirada al instalar la citada plaza provisional. De este modo, se volverán a colocar vigas de madera sobre las columnas de piedra que desde hace meses lucen descoronadas en este enclave.

Asimismo, en esta remodelación se repondrá el pavimento en los puntos en los que actualmente se encuentra más deteriorado, fundamentalmente entre la residencia de mayores y la calle Manuel García Barros así como ante la zona en la que suele instalarse una pulpería durante el mercadillo sabatino.

Las obras se utilizarán para la retirada del kiosco -ahora propiedad municipal- y para reubicar la máquina expendedora de leche fresca, acondicionando una zona más apropiada y estética para este servicio. El proyecto también incluye la eliminación de la zona ajardinada en pendiente que existe ahora entre los columpios y la acera. Las explicaciones ofrecidas en su momento por el Concello apuntan a que se ganará espacio en esta parte de la plaza para el paso de los usuarios, elevando el actual nivel del jardín hasta crear una pequeña explanada -pavimentada en piedra y protegida con una barandilla- en la que se instalarán bancos, la referida máquina expendedora y una estructura mixta de ocultación de los contenedores.

Por lo que respecta a las plazas de aparcamiento en batería que existen en este entorno del casco urbano, las previsiones pasan por que queden operativas siete de ellas, reservando uno de estos espacios para discapacitados

Jardineras, siete bancos de dos metros y 14 sillas individuales fabricados en madera y fundición compondrán el mobiliario urbano que se instalará en distintos puntos de la plaza. El Concello proyectó también para este entorno pivotes retráctiles con luz superior alternos con otros fijos para garantizar la accesibilidad o el cierre completo al tráfico, según corresponda, del tramo comprendido entre la calle Waldo Álvarez Ínsua y la Praza do Mercado.