El mandatario lalinense, Rafael Cuiña, y el alcalde de aldea de Castro, José Manuel Fernández Ledo, fueron llamados por el juez para declarar como investigados por el caso de las firmas falsas de O Corpiño el próximo lunes. El representante municipal y el vecino de Castro están citados para las 10.30 horas para testificar por la denuncia presentada por la concejala del Partido Popular Eva Montoto, acusados de un posible delito de calumina.
El titular del Juzgado Número 2 de Lalín emitió un auto el pasado día 8 en el que, tras recibir las actuaciones del atestado de denuncia realizado por la Guardia Civil "por un presunto delito de calumnia", entiende que se presume que podría existir este delito tipificado como leve. Cuiña comparecerá en los juzgados en calidad de investigado y el representante vecinal de Castro también. A este último, además, se le requerirá a que manifieste si presta su consentimiento para acceder a su teléfono móvil al objeto de poder cotejar las capturas de pantalla obrantes en el atestado policial.
Cabe recordar que en la declaración ante la Policía Judicial, en el cuartel, al alcalde de Castro le fueron localidados mensajes con Cuiña para urdir el montaje de la campaña de firmas contra la moción del PP por la dinamización del santuario de O Corpiño bajo una identidad de un vecino inventada que se llamaría Luis Madriñán Crespo y sería de esta parroquia. Las indagaciones de la Policía Judicial de la Benemérita concluyeron que bajo este nombre se escondía Fernández Ledo, quien dio su número de teléfono a esta Redacción para anunciar la recogida de signaturas y que ésta tuviese repercusión social.
En su declaración en el cuartel, el 31 de mayo por la noche, este vecino culpó al mandatario local de ser el promotor de la campaña y dijo que se lo había propuesto durante una reunión entre ambos. Aseguró entonces que Cuiña le propuso si estaba dispuesto a hacerse pasar por un vecino de O Corpiño y, bajo una identidad falsa, emprender una recogida de firmas contra la iniciativa del PP. Fernández Ledo dijo a los agentes que había aceptado por la sintonía que tiene con el partido político del mandatario y que éste no le había ofrecido nada a cambio. Durante su testimonio admitió que no era consciente del alcance que iba a tener esta maniobra impulsada por el primer edil lalinense, que estaba arrepentido y que deseaba pedir perdón.
Las diligencias policiales concluyeron que Rafael Cuiña -que también pasó por el acuartelamiento en compañía de un abogado y emplazó su declaración a sede judicial- había sido el "director", "planificador" y "ejecutor" de una campaña urdida con el ánimo de perjudicar al partido de la oposición y a Eva Montoto. La concejala popular entregó a la Policía Judicial en su denuncia -para que se clarificase la identidad del inexistente Luis Madriñán Crespo- un cedé con una grabación de una entrevista del regidor en una emisora de radio, en la que comparó a Montoto con el ministro de Propaganda de la Alemania nazi Joseph Goebbels. Además de Cuiña y el alcalde de aldea de Castro, prestó declaración en el cuartel días atrás un cargo de confianza del mandatario. En el plneno de este mes, Cuiña comparecerá para explicar su versión sobre este caso tras reiterar que no tiene pensado dimitir.
