El alcalde de Lalín, Rafael Cuiña, descarta presentar su dimisión por el caso de las firmas falsas de O Corpiño. El mandatario sostiene que ya dio explicaciones en su momento sobre un asunto por el que está siendo investigado por la Guardia Civil y que lo llevará al juzgado a declarar el próximo día 20, junto con el alcalde de aldea de Castro, José Manuel Fernández Ledo, y que comparecerá a petición propia en el pleno de este mes. Alega que la semana pasada ya formalizó el registro de comparecencia por voluntad propia, no porque lo solicitase luego el Partido Popular.

Cuiña rehúsa cesar en su puesto luego de que la concejala popular Eva Montoto, que presentó la denuncia para que se esclareciese la identidad de Luis Madriñán Crespo -luego resultó ser un nombre ficticio- dejase caer que si en este escándalo se viese involucrado un miembro del PP ya habría dimitido por la presión social y política a la que estaría sometido.

Rafael Cuiña reitera que será en sesión plenaria donde dará explicaciones y alega que por el momento no tiene constancia de la petición de comparecencia solicitada por el grupo popular. Además de ante la corporación, el alcalde y el representante vecinal de Castro testificarán el día 20 ante la titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Lalín, a donde llegaron las diligencias practicadas por el equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil tras la denuncia presentada por Eva Montoto el 31 de mayo. El instructor de este atestado policial defiende que Cuiña es supuesto autor de los delitos de calumnias e injurias. A esta conclusión llegan los agentes después de tomar declaración al representante vecinal de Castro. La burda maniobra de hacerse pasar por el vecino Luis Madriñán Crespo -la Guardia Civil concluyó que no existía después de revisar archivos policiales o administrativos- no solo tendría el visto bueno del mandatario local, sino que la idea de la creación de esta entidad falsa partiría de él. El recorrido judicial de la demanda de Eva Montoto se sustenta, además de las informaciones en prensa escrita o en redes sociales, en una entrevista concedida por Cuiña en una emisora de radio comarcal. Allí llamó a la edil del PP "pequeña aprendiz de Goebbels" y dijo que los que gobernaban antes estaban acostumbrados a "este tipo de persecuciones y coacciones". Montoto entregó un cedé a la Policía Judicial con una grabación del espacio radiofónico como prueba, para junto con las demás aportadas, que se localizase a Luis Madriñán Crespo como responsable de la campaña de firmas, además de que se aclarase a quién había presionado ella por la campaña de firmas contra su partido.

En la declaración del alcalde de Castro ante la Policía Judicial en el cuartel, el 31 de mayo éste descarga en Cuiña toda la responsabilidad del montaje de las firmas. Dice que el regidor, a mediados de mayo, le dijo si estaba dispuesto a hacerse pasar por un vecino de O Corpiño disidente contra la propuesta del PP. "Le dije que lo hacía sin problema", declaró. Entonces, añade, Rafael Cuiña le dio las pautas para, primero contactar con esta Redacción para difundir la noticia y luego, desde el gabinete de la Alcaldía, se le proporcionó un cuadro tipo donde se recogerían las signaturas. Fernández Ledo dijo a los agentes de la Policía Judicial que aceptó el ofrecimiento de Cuiña porque se lleva bien con el partido del mandatario y poco después reconoció que estaba deseando que acabase "esta mentira" con la que nunca quiso causar daño a nadie.

Preguntado por si Cuiña le había ofrecido algo a cambio, respondió que no. Al día siguiente de Fernández Ledo fue citado en el cuartel el mandatario lalinense, que se negó a declarar. Luego testificó al menos uno de los asesores del mandatario. Próximamente está previsto que se añadan más diligencias al expediente que ya está en el juzgado. Allí deberán comparecer Rafael Cuiña y Fernández Ledo el día 20. El vecino de Castro podrá o no ratificar su declaración en el cuartel, que podría ser considerada nula de pleno derecho por hacerlo sin un abogado.