La tasa de riesgo de pobreza en las comarcas es la más baja de la provincia, aunque este dato satisfactorio no evita que el 15,4% de la población tenga ingresos equivalentes inferiores a un límite, que en Galicia, está establecido en el 60% de la mediana de las rentas equivalentes. Según datos que maneja la administración autonómica, la situación en Deza y Tabeirós es mejor que la de otras comarcas pontevedresas y, si tomamos como referencia la evolución en un año, el índice de pobreza se ha rebajado en casi medio punto porcentual. El último informe es referido a 2014. Pero si retomamos el escenario que presentan las comarcas en su conjunto y lo comparamos con la proporción de ciudadanos en riesgo de vulnerabilidad económica o de falta de recursos básicos, hay que indicar que en el sur de la provincia la tasa de pobreza está en el 27%; es decir, afecta casi a un tercio de la población. En las comarcas de Caldas y O Salnés se sitúa en el 23,3% y en O Morrazo, son algo más de 20 de cada 100 ciudadanos. El área de la capital de provincia es la que más se acerca a lo que acontece en Deza y Tabeirós, aunque su índice de pobreza es más elevado, una vez que se sitúa en el 17%. Un punto porcentual más está en la comarca de Vigo.
Si observamos la evolución en los últimos años y, tomando como referencia 2009 como el del comienzo de la crisis económica, desde entonces las personas con serias dificultades han aumentado, sobre todo entre este año y el siguiente. Así las cosas, si en 2009 poco más del 12% de los vecinos de las dos comarcas estaban en una situación de clara desventaja social, la tasa de pobreza aumentó al año siguiente hasta el 14,45%. La diferencia más acusada con el promedio de la provincia se dio durante 2011. Mientras en Deza y Tabeirós el índice de población con este tipo de carencias caía hasta uno de cada diez ciudadanos, en la provincia afectaba a casi el 18% del total. Pero lo ocurrido en 2011 en las comarcas sufrió un notable cambio al año siguiente, pues no solo el censo de personas pobres seguía cayendo, sino que experimentaba una importante subida y, con el peor dato, afectaba casi a veinte de cada cien habitantes. Doce meses después la tasa caía al 16%. Si observamos los últimos datos de riesgo de pobreza en Galicia, conviene indicar que mientras en Deza y Tabeirós está en el 15,4%, en la comunidad autónoma, de media, es exactamente un punto porcentual más. De las cuatro provincias, Lugo es la que presenta una situación más solvente y, Pontevedra, la peor.
En otro orden de cosas, el Instituto Galego de Estatística (IGE) también analiza otros parámetros como el censo de hogares en los que los ingresos por prestaciones de distinto tipo representan una importante fuente de ingresos o incluso que son la única forma que tienen estas familias de obtener recursos económicos. Pensiones, prestaciones sociales, ayudas de emergencia y otras compensaciones públicas suponen para casi la mitad de los hogares el más del 50% de las rentas que cada mes llegan a sus hogares. En el 39% de las casas las prestaciones suponen tres cuartos de sus fondos.
Pero el dato más relevante es el que tiene que ver con las familias en las que estas rentas son la única fuente de ingresos para llegar a fin de mes. En las comarcas son prácticamente el 33%.
