El Concello de Rodeiro ordena el cese definitivo de la actividad de la sociedad Explotaciones Porcinas Achacán S.C. en Aboldrón en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

El TSXG apela a la distancia mínima que debe respetarse para las construcción de estas granjas, con una capacidad de 1.000 cabezas de porcino, con referencia a los núcleos urbanos. En este caso, tal y como recoge la sentencia, las granjas, promovidas por Achacán, se sitúan a 674 metros del lugar de Vilanova y a 750 metros de Albodrón. En concreto, el fallo máximo del órgano reconoce que debe fijarse una distancia de al menos un kilómetro. Este margen de seguridad debe respetarse no solo con respecto a núcleos de poblaciones, sino también a otras explotaciones, con la importancia de preservar este perímetro de seguridad como prevención en la propagación de enfermedades animales, contra su erradicación, máxime cuando pueden ser transmitibles al ser humano.

Aunque el Concello justificó las concesiones en base a la escasa población afectada, señalando que en el núcleo poblacional de Vilanova constaban empadronados un total de 22 personas y en el Albodrón solo 14, lo que dejaban un cómputo de 36 vecinos, fueron descartadas por el TSXG. Por lo tanto, tras ordenar el cese definitivo, las instalaciones deberán quedar vacías de animales de raza porcina, prohibiéndose cualquier otra actividad en ellas hasta no disponer de una licencia a la que ampararse, en caso de no cumplir en el plazo establecido de un mes dicha noticficación se enfrentarán a una multa de entre 1.000 y 10.000 euros.

La concesión de la licencia de obras y actividad de las granjas supuso, en su momento, un punto de inflexión y desencuentro para el gobierno conformado por PSOE y BNG. El ejecutivo aprobó en febrero de 2011 la autorización municipal para la explotación ganadera en una junta de gobierno local con la ausencia del que era por entonces edil nacionalista, Manuel Hermida, el cual interpuso un recurso de apelación contra esta concesión en noviembre de 2014 ante el Juzgado del Contencioso-Administrativo Número 3 de Pontevedra que desestimó la propuesta. Pero el hoy exedil acudió al Tribunal Superior, que sí ha tenido en cuenta su apelación, como hizo público en noviembre de 2015. Finalmente, en marzo de este año, el Contencioso-Administrativo de Pontevedra comunicaba al Concello de Rodeiro la firmeza de la sentencia del TSXG para proceder a su ejecución, esto es, el cierre de la explotación al invalidar la licencia que en su momento otorgó el bipartito.