Antonio Lamas Carral será el presidente de la Asociación de Empresarios de Deza (AED) los dos próximos años. La candidatura del dirigente en funciones ganó claramente las elecciones de anoche al cosechar el 68% de los votos emitidos en una jornada bronca y con momentos de tensión entre miembros de esta lista y de la alternativa que lideraba Gerardo López Cobas. En el recuento, que finalizó pasada la una y media de la madrugada, Lamas obtuvo 175 papeletas, por las 78 de López Cobas. Dos votos fueron declarados nulos y hubo otros dos en blanco.

Las primeras elecciones en la patronal dezana en sus 23 años de historia comenzaron a las 21.00 horas con una altísima participación, pues ejercieron su derecho a voto 257 personas de un censo de 317 y por momentos la sede de la AED se quedó pequeña para acoger a los centenares de votantes, miembros de las dos candidaturas y personas que se quedaron hasta la madrugada para comprobar el veredicto de las urnas. Con el voto delegado en cuestión por el equipo de López Cobas, la directiva en funciones colocó en la sala dos sillas; una para un asesor jurídico -del bufete que trabaja para la AED- y otra para una notaria. Los finalmente 65 votos delegados no fueron determinantes en la victoria de Lamas, pero sus contrincantes solicitaron a la mesa electoral cuando acabó el voto presencial que se anulasen por entender que contravenían los estatutos.

La propuesta de impugnación se situó en los mismos términos que el anunciado recurso registrado anteayer por la candidatura de Gerardo López. Por un lado el miembro de su lista José Luis Pérez Donsión expuso en público que el voto rogado sí podía estar contemplado en la normativa, pero los desfasados estatutos no indicaban en qué términos podía emplearse. En este recurso, cuyo contenido leyó en la mesa electoral la secretaria técnica de la AED, Chus García, se planteaba asimismo que o bien se anulasen estos votos o que se habilitase una urna alternativa. Otras de las dudas surgieron cuando, a juicio del equipo de López Cobas, algunos de estos votos no presenciales llegaban siempre de manos de candidatos de Lamas. El asesor jurídico, cuestionado por la candidatura alternativa, propuso que la impugnación fuese desestimada, aunque antes la mesa ya había actuado en la misma dirección. Hubo momentos de cruce de acusaciones con palabras gruesas entre miembros de ambas listas. Mientras el equipo de Lamas explicó que el voto rogado no solo es legal sino que se recoge en los estatutos, la otra parte habló de un uso perverso de este mecanismo, una vez que cada asociado podía traer la papeleta de otros dos más.

Los aplausos para Lamas y su equipo precedieron al momento en el que el presidente electo y López se estrecharon las manos. Lamas lanzó un guante a sus rivales para que se integrasen en los grupos de trabajo de la patronal, "porque lo que importa es la unión de los empresarios" y abrió las puertas de la institución a sus rivales, invitando a López a reunirse con él en una semana. "Lo que me preocupa es la continuidad de la AED y que estemos todos unidos", dijo. López lo felicitó , celebró la participación y dijo que esta jornada había sido una muestra de lo que es la esencia de la democracia.