El alcalde de Silleda, Manuel Cuiña, ya trasladó a Fomento y a la Diputación las peticiones que le formuló el presidente de la asociación Olaia, Rosendo Estévez, para mejorar la seguridad vial en carreteras de su titularidad.

Cuiña señala que "está encaminada" la posibilidad de que Fomento cambie los pasos de peatones en la entrada de Silleda por la N-525 desde Lalín. El colectivo también había demandado la colocación de señales luminosas para reducir la velocidad. Más complicado está variar el paso elevado que da acceso a la carballeira das Pedrosas, sobre una carretera propiedad de la Diputación, pues en este enclave se contempla, desde hace años, construir una rotonda. Desde la Alcaldía, Cuiña también señala la conveniencia de unificar las placas de todas las calles del casco urbano, y adelanta que, en cuanto a mejorar la señalización del monasterio de Carboeiro y de la Fervenza do Toxa, el Concello ya dispone de un proyecto para actuar desde A Bandeira y desde la gasolinera de Silleda, pero falta financiación.