Solo dos concellos de Deza y Tabeirós no tienen obligaciones pendientes con los bancos. Son Rodeiro y Forcarei los que no deben dinero a las entidades financieras, mientras que los demás municipios de las comarcas tienen pendiente de liquidar 11,7 millones de euros. Una mayor capacidad de obtención de ingresos permite a algunas administraciones municipales mantener un nivel de endeudamiento soportable, pero en otros casos no se pudo hacer frente a amortizaciones importantes y el pasivo se mantiene en unos índices bastante elevados. Lalín, Silleda y Agolada deben a los bancos más que los 201 euros por vecino del promedio de los ayuntamientos de la provincia y en el caso de la capital agoladense el pasivo por habitante es más del doble que la media.
En los recientes datos a conocer por el Ministerio de Hacienda, Lalín mantenía, a 31 de enero del año pasado, pendiente de pago a la banca 4.266.000 euros, que son 213 euros por habitante. Esta cifra rebasa en 12 euros per capita el promedio provincial, pese a que el montante pendiente de abono a las entidades crediticias se redujo en un año en casi 1,4 millones. Lalín fue, en doce meses, el concello de las comarcas que más esfuerzo hizo por amortizar deuda. Más importante es la capacidad de rebajar pasivo con la banca si nos remontamos a hace tres años, cuando la deuda superaba los 8,2 millones. Este hecho coyuntural tuvo un responsable: la compra del Lalín Arena por 7,15 millones, de los que cinco fueron a préstamo y los demás salieron de remanente.
La deuda por habitante en Silleda está en 336 euros y la total en 2.951.000. En un año el capital amortizado alcanzó los 192.000 euros. La localidad trasdezana, Dozón y Agolada están sometidas a un plan de ajuste por incumplimientos en los plazos de pago a proveedores, pero es sin duda la capital agoladense la que tiene más números rojos con la banca. Sus algo más de 1,1 millones de euros suponen unas obligaciones de 439 euros por habitante. Solo hay cinco municipios en la provincia que deben más por vecino que Agolada. Son: Catoira (1.370 euros), Mos (699), Vilanova de Arousa (664), Sanxenxo (600)y Cangas (537). El municipio agoladense rebajó, en un año, su deuda en solo 83.000 euros.
El pasivo por residente en Vila de Cruces está en 42 euros y el total es de 234.000. Dozón debe a las entidades crediticias 175.000 euros (149 por habitante) y en un año, pese a estar inmerso en un plan de ajuste, no fue capaz de amortizar un solo euro. A Estrada tiene pendiente de liquidar por préstamos 2.634.000 euros, lo que representa una media por habitante de 125. Este concello solamente amortizó 79.000 euros en un año. El pasivo por vecino en Cerdedo es de 198 euros y su deuda viva total suma 363.000 euros. Y la rebaja de deuda se situó en 27.000 euros en doce meses.
Forcarei y Rodeiro mantienen a cero por segundo año consecutivo sus préstamos. Los otros 17 municipios de la provincia sin deuda bancaria al cierre del año pasado son: Baiona, Campo Lameiro, Cotobade, Covelo, Cuntis, Fornelos de Montes, Meaño, Mondariz, Moraña, Mondariz-Balneario, As Neves, Pazos de Borbén, Pontecesures, Ribadumia, O Rosal, Soutomaior, Tui y Valga.
