Ningún proyecto de A Estrada sabe tanto de llamada ley de Murphy -se basa en la máxima pesimista "si algo pude salir mal, saldrá mal"- como la variante de la N-640 a su paso por el casco urbano estradense. Con décadas de tramitación en su haber, esta infraestructura continúa sin despegar. Y no lo hará por ahora. Y es que un informe de Patrimonio de la Xunta de Galicia acaba de frenar en seco nuevamente el trámite ambiental. El alcalde estradense, José López Campos, explicó que la resolución en cuestión considera que no se respetaron todas las alertas arqueológicas en lo referente a la afección de la circunvalación a un castro de Aguións, situado en el entorno del Pazo de Preguecido.

El munícipe aclaró que el trazado de la variante pasa al lado de este castro. Aunque en un primer momento este discurrir no encontró obstáculos en el departamento de Patrimonio, ahora sí se considera preciso realizar prospecciones arqueológicas para determinar hasta qué punto llegaría exactamente este antiguo asentamiento poblacional, a fin de evaluar con mayor conocimiento la afección que el trazado escogido para la variante podría suponer.

El proyecto para la variante de A Estrada emprendió el pasado año nuevamente el proceso de información pública de evaluación ambiental, habida cuenta de que el trámite realizado en 2009 superó su vigencia de cuatro años y debía, además, adaptarse a la nueva normativa surgida en esta materia. En base a las explicaciones ofrecidas desde el gobierno estradense, en el trámite que caducó el informe de Patrimonio no ponía objeción alguna. Sin embargo, se entiende que ahora el departamento fue "más minucioso".

Ello sitúa a la variante todavía en pleno trámite ambiental y en punto muerto, ya que será preciso realizar, en base al referido informe, prospecciones arqueológicas y, en función de su resultado, valorar si el trazado elegido es los suficientemente respetuoso con este patrimonio. Por tanto, la tramitación no podrá continuar adelante, en base a las últimas informaciones que maneja el ayuntamiento, hasta realizar este estudio más detallado a nivel arqueológico.

El alcalde de A Estrada se interesó estos días por conocer el estado actual de la tramitación, después de haber sido informado sobre el referido informe.

El Ministerio de Fomento aprobó en el verano de 2009 -hace por tanto casi siete años- el trazado para la variante de A Estrada. En virtud de la planimetría y la información remitida entonces, la circunvalación partiría de Matalobos. Después del primer enlace, la vía volverá a desplazarse (a la izquierda) para no afectar a un conjunto de robles. Seguidamente, a partir del punto kilométrico 1,600 se aproxima al camino que se encuentra al sur del bosque mixto y, una vez rebasado este entorno, se proyectó una alineación recta hasta alcanzar el que será el segundo enlace. Tras él, hasta pasado el barranco de Ponte Novo la traza discurre con una alineación recta, antes de separarse de unas edificaciones. Después se cruzarán las carreteras EP-7005 y PO-213 (el vial que comunica A Estrada con Ponte Ulla) y seguidamente se salva el arroyo de Regueiro de Vilar mediante una estructura que dejará espacio para un camino que habrá de conectar ambos lados de la variante.

Se indicó entonces que, entre el citado cauce y el río Liñares, está programada una alineación curva, que finalmente se aleja -apuntaba Fomento- con respecto al estudio informativo del Castro de Preguecido, buscando evitar de este modo una afección a la zona de protección integral del yacimiento. Por tanto, la traza aprobada definitivamente ya contemplaba entonces alejar la variante del castro, un entorno que ahora vuelve nuevamente a estudio.

Las últimas informaciones sobre este aguardado proyecto para liberar del tráfico pesado y de largo recorrido al casco urbano de A Estrada suponen un nuevo atranco para este proyecto, teniendo en cuenta que Fomento preveía ya la licitación de las obras de la variante para el segundo semestre del año pasado.

En este sentido, En Marea presentó una iniciativa en el Congreso para que el ministerio aclare si tiene previsto ejecutar este año la partida -4,3 millones- reservada en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).