Pedrosa y el alcalde se lanzaron reproches mutuos desde que Comisiones presentó la denuncia ante inspección laboral. Cuiña acusó al sindicalista de actuar en connivencia con el PP por haber ocultado la situación de la plantilla durante más de 20 años. Pedrosa replicó que el mandatario y su gobierno habían favorecido a otras centrales sindicales, acabando Comisiones con la única representación sindical en el ayuntamiento. En estos enfrentamientos, Pedrosa recomendó a Cuiña que actuase con más mesura y cuestionó su sentido de la democracia cuando dijo que por fin había llegado la libertad sindical al concello. El representante de Comisiones aprovechó su comparecencia de ayer para lanzar más ataques a Rafael Cuiña, aunque entrando ya en un terreno un tanto comprometido. Dijo que como conoce las empresas podría hablar de "cómo se hizo en algunas empresas la campaña de las elecciones municipales". Habló de prácticas no democráticas en sociedades de Lalín en una alusión que sonó directamente a las relacionadas con la familia de Cuiña. Dijo que hubo casos que rozaron la "extorsión" y de "coartar la libertad de voto de las personas".