Recogiendo el guante lanzado en su día por el grupo municipal del BNG, el Concello de A Estrada se encuentra estudiando la posibilidad de crear una bolsa de vivienda en el casco urbano destinada a situaciones de emergencia social, una actuación que dé continuidad a un proyecto que se pensó emprender en el ámbito rural, haciendo uso de antiguas escuelas unitarias. La edil de Benestar Social, Amalia Goldar, reconoció que la propuesta está sobre la mesa pero que tendrá que ser todavía estudiada pormenorizadamente, una labor en la que el gobierno pretende contar con la colaboración de los grupos de la oposición.

Goldar Cora subrayó que la puesta en marcha de una bolsa de vivienda en la villa, nutrida con pisos que se encuentren abandonados o desocupados y cuyos propietarios estén interesados en incorporarlos a esta iniciativa, exige la configuración y aplicación de un reglamento específico. Apuntó que tendría que ser una normativa muy detallada en la que se contemplen aspectos como cuáles serían los requisitos para el acceso a este tipo de vivienda, por cuánto tiempo se ocuparían estos inmuebles, cuál sería el régimen jurídico vinculado a esta ocupación o la estipulación "muy clara" de los derechos y deberes de inquilinos y arrendadores. Habría que aclarar también en estas reglas quién se encargaría de realizar el abono al propietario de estos pisos, si quien los ocupa o el ayuntamiento.

Para avanzar en esta cuestión, la edil de Benestar Social explicó que estuvo analizando reglamentos que se emplean ya en bolsas de vivienda similares puestas en marcha en algunas ciudades. En todo caso, reconoció que esta iniciativa está todavía en proceso de maduración, esperando contar lo antes posible con un borrador que siente las bases de la normativa de uso de estos inmuebles. "Tenemos que sentarnos y trabajarlo, y no nos va a llevar una comisión ni dos", asumió Amalia Goldar, que consideró que en este proyecto "tenemos que ir todos de la mano".

No quiso dejar de reconocer que la sugerencia de creación de vivienda urbana para la emergencia social llegó del portavoz nacionalista, Xosé Magariños, e incidió en que la considera una aportación "muy apropiada". Apuntó que con esta bolsa de vivienda urbana se lograría un doble objetivo: disponer de una solución en materia de vivienda para situaciones de emergencia social a bajo coste y, por otro lado evitar para los propietarios de los inmuebles el deterioro que los pisos terminan experimentando al encontrase deshabitados.

Tras conocer la intención del Concello de poner en marcha una bolsa de vivienda para emergencia social a través de escuelas del rural, el BNG planteó que sería interesante que este tipo de viviendas para emergencia social se localicen también en el casco urbano, subrayando que no todas las familias tienen medios para desplazarse, por lo que su asentamiento en el rural podría no resultar oportuno.

Con el presupuesto municipal para este 2016 recién estrenado, el Concello se pondrá manos a la obra para elegir las casas escuela que podrían emplearse para un proyecto que dispone en la cuenta de este año con una consignación de 30.000 euros. Goldar reconoció que la decisión todavía no está tomada, si bien desde el ayuntamiento se reconoció hace unos meses que se estaban estudiando múltiples opciones.

Se estima que la citada cuantía -podría ampliarse si el municipio dispone finalmente de fondos europeos para su proyecto A Estrada Social e Sostible, en el que tiene encaje esta red de viviendas- permita actuar en tres o cuatro escuelas. Las candidatas que contarán con más posibilidades serán aquellas cuyo estado permita ponerlas de forma más o menos inmediata al servicio de esta finalidad sin requerir una profunda y costosa intervención.

Cuando se dio a conocer este proyecto se incidió en que las escuelas que se rehabiliten no se convertirán en ningún caso en viviendas sociales sino en inmuebles destinados a hacer frente a casos puntuales y de emergencia social, como podría ser un desahucio, un accidente que implique la pérdida de la vivienda habitual o una situación de malos tratos, por ejemplo.