El grupo semafórico radicado en el cruce de la avenida de Santiago con Antón Losada continuaba ayer averiado. Fue uno de los tres que resultó afectado por la tormenta. Los otros dos -los de Castelao y Pérez Viondi con Benito Vigo- ya fueron reparados por una empresa viguesa especializada en su mantenimiento en la jornada del lunes.

Ayer, según fuentes municipales, se restableció la práctica normalidad en el alumbrado público, también dañado por la tormenta. Personal del departamento de Iluminación trabajaron intensamente en los dos últimos días para hacerlo posible. La Gran Vía se había quedado a oscuras. Varios cuadros habían estallado. Muchos puntos de luz aguantaron porque a la hora en que cayeron los rayos estaban apagados.