Los cuatro juzgados que operan en los partidos de Lalín y A Estrada registraron durante el año pasado 131 rupturas matrimoniales, según los datos que figuran en el Consejo General del Poder Judicial. (CGPJ) La cifra es una de las más bajas de los últimos años, por delante de las 119 de 2013, puesto que en 2014 se habían constatado 144 rupturas, entre separaciones y divorcios -en la zona no se solicitan nulidades matrimoniales-, mientras que en 2010, en plena crisis económica, se habían tramitado 143 disoluciones de parejas en Deza y Tabeirós-Montes.
El CGPJ distingue entre divorcios y separaciones en las que hay consenso entre las partes de aquéllos que no tienen acuerdo previo y que por tanto deben resolverse por un juicio contencioso. Comencemos por los divorcios. Durante el año pasado, se despacharon en total 70 casos consensuados y otros 55 en los que no había acuerdo entre las partes. Dentro de los divorcios con consenso, 36 pertenecen al partido judicial de A Estrada, en el que por trimestres se despacharon 7 entre enero y marzo, 10 de abril a junio, otros tantos entre julio y septiembre y 9 de octubre a diciembre. También se da ese equilibrio entre los 34 divorcios tramitados en los juzgados de Lalín: 8 se resolvieron entre enero y marzo, otros tantos entre abril y junio, mientras que los 18 restantes se reparten a partes iguales en los periodos comprendidos entre julio y septiembre y el que va de octubre a diciembre.
Un divorcio no consensuado suele conllevar un mayor gasto para los matrimonios que lo soliciten, y de ahí que tanto en la zona como a nivel general sean menos habituales. El año pasado se produjeron, como decimos, 55 divorcios sin acuerdo previo, distribuidos entre los 24 del partido judicial de A Estrada y los 31 de Lalín. En este apartado sí se nota más actividad en unos trimestres que en otros. En el caso de A Estrada, entre enero y marzo se despacharon 5 expedientes, que pasan a 11 al trimestre siguiente. Tras los 3 resueltos de julio a septiembre, la cifra sube hasta los 5 en el último trimestre del año. Una situación idéntica se da en Lalín: esos 31 divorcios sin acuerdo se reparten entre 11 para el primer trimestre del año y 9 para el segundo, pero las cifras caen ya a los 6 para el periodo entre julio y septiembre y 5 para el de octubre a diciembre.
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A modo de curiosidad, cabe señalar que la crisis ha invertido la tendencia de las parejas a la hora de poner fin a su relación: si en 2015 predominan de forma clara los divorcios consensuados, cinco años atrás la situación era la inversa, pues se resolvieron 64 divorcios de común acuerdo frente a otros 77 en los que no había consenso entre las dos partes.
Datos provinciales
Los datos del Consejo General del Poder Judicial también dejan claro que los vecinos de la zona, una vez que deciden poner fin a su relación matrimonial, optan por el divorcio en lugar de por la separación. Y es que el año pasado solo se produjeron seis separaciones. Dos de ellas fueron consensuadas y en el partido judicial de Lalín. De las cuatro restantes, tres se resolvieron en A Estrada y una en los juzgados de O Regueiriño.
Este claro predominio de los divorcios también es patente en los datos globales de la provincia. Los partidos judiciales de Pontevedra resolvieron durante 2015 un total de 2.714 divorcios, frente a sólo 145 separaciones. De los divorcios, 1.500 entraron en los juzgados con un acuerdo previo entre los afectados, mientras que los otros 1.214 eran sin consenso. Lo mismo ocurre con las separaciones: 113 son consensuadas y en 32 no hay convenio. A modo de curiosidad, en la provincia de Pontevedra se tramitó una nulidad matrimonial. Esta figura no es muy recurrida por su coste, su complejidad y su demora en el tiempo, unos dos años. En septiembre del año pasado se introdujeron cambios en el Derecho Canónico para acelerar los procesos, de modo que los plazos se reduzcan a un año y ya no sean precisas dos sentencias favorables. En todo el país se resolvieron 56 nulidades matrimoniales. Casi la mitad, 22, se cursaron en Barcelona.
De regreso a Deza y Tabeirós-Montes, los juzgados también se encargaron de dirimir sobre cuestiones como la modificación de medidas de estas rupturas (en las que se abordan cuestiones como las pensiones de alimentos) o la guarda custodia de los hijos. Hubo más movimiento en la modificación de medidas no consensuadas (con 27 expedientes frente a 6 en las que estas medidas estaban pactadas entre las dos partes). En cuanto a la guarda custodia de los hijos, en total se realizaron 29 procesos, 15 de ellos con consenso.
