Todo el mundo que lo conoce coincide en señalar que se trata de un erudito que transmite sus bastos conocimientos con una modestia y un estilo didáctico realmente encomiable. Invierte muchas horas en recorrer a pie las tierras de la comarca dezana para dar a conocer sus tesoros todavía escondidos. Antonio Presas es así, y no lo disimula.
-¿Cómo recibió el premio del Concello de Lalín?
-Me enteré de que me habían premiado por la información publicada en FARO DE VIGO hace unos dos meses, cuando se estaba instruyendo el expediente. La verdad es que lo recibí con sorpresa y hasta incluso no supe cómo reaccionar cuando lo supe. Me cogió totalmente por sorpresa y no contaba con ello. Hasta incluso pensé, y sigo pensando, que yo hice un trabajo humilde y, tanto el gobierno municipal como muchas otras personas, entienden que son merecedor de un premio. Lo acepto, le doy las gracias a todos pero sigo pensando que sólo hice humildemente mi trabajo.
-¿Le sorprendió que no hubiera unanimidad en el pleno a la hora de votar la proposición municipal?
-No me gustó que esa cuestión sucediera de esa manera. Yo creo que entendieron mal la situación porque el patrimonio es de todos, la cultura es de todos y el medio ambiente es de todos. Yo creo que utilizaron la votación para hacer una crítica a los que defendemos la cultura, el medio ambiente y el patrimonio. Se trata de una crítica negativa a todo lo que hice porque, si soy sincero, tampoco entiendo ni las abstenciones. Yo creo que debieron haber votado positivamente porque todo se hizo en positivo, y algunos debieron de entender que hacía la guerra contra alguien, algo que nunca hice contra nadie en persona. Son libres de votar, y allá ellos con su conciencia, pero si pretendían ofenderme como persona les tengo que decir que no lo consiguieron para nada.
-¿Animan estos premios a seguir trabajando en recuperar el patrimonio dezano?
-Hablando claramente, ni me anima ni todo lo contrario. Yo voy a seguir haciendo lo mismo que hice siempre. Si hago más de lo hacía hasta ahora, será porque tengo más tiempo. También es cierto que soy una persona de más edad que antes, y con menos capacidad de trabajo que tenía en otros tiempos. Antes desempeñaba una función docente, que ahora no tengo, pero mi interés por el patrimonio, el medio ambiente y por la cultura sigue siendo el mismo de siempre, está inalterable. ¿Me dieron una condecoración? La agradezco mucho y se la dedico a todos los que piensan lo mismo que yo. Esto va por Lalín, para Lalín y ¡viva Lalín!
-¿Hace falta seguir trabajando en esa tarea de recuperar el patrimonio, la cultura y el medio ambiente?
-Por supuesto que sí. Ahora no estamos en el punto cero. Daniel y Armando Vázquez fueron de los que más contribuyeron, entre otros, a romper ese punto cero. Siempre pensé que esa era una obra vieja, de otra época, pero publicada con retraso porque debió de haberse publicado en 1935, cuando ardió la obra del Seminario de Estudos Galegos. Daniel y el resto son los verdaderos herederos de aquella iniciativa.
