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El arte urbano · Pintadas en Lalín

Mensajes que perduran bajo el sol y la lluvia

Declaraciones de amor y reflexiones políticas adornan desde hace años las paredes de edificios en varias calles del casco urbano de Lalín

Desde hace tiempo, varias paredes del casco urbano de Lalín -y también el Párking Aldea Grande durante la época en que estuvo cerrado y se conocía como Párking Europa- lucen leyendas reivindicativas, de amor o incluso dibujos tan simples y hermosos como la flor que puede contemplarse en la calle Z en su entronque con Luis González Taboada y que como única aclaración lleva la frase "flores en el barro". Forman parte ya de la estampa urbana, como ocurre en ciudades más o menos grandes en que estas creaciones son reflejo de manifestaciones artísticas individuales más que de la existencia de tribus urbanas.

Porque, a decir verdad, los grafitis van mucho más allá de la cultura hip hop, de la que en Lalín hay escasos, sino ningún, seguidores. En realidad, los grafitis ya se daban en la antigua Roma, aunque por entonces esta actividad se denominaban scariphare (que significa incidir con un punzón). En los lugares menos afectados por la erosión, como catacumbas, las ruinas de Pompeya y Herculano -protegidas por la ceniza de la lava- o en cuevas aún se conservan dibujos y caricaturas de la época imperial, así como leyendas en latín vulgar que lo mismo son consignas políticas que insultos o declaraciones románticas.

Política y amor son, precisamente, los temas que predominan en las pintadas de los muros de las calles lalinenses. Una misma mano, por la tipografía de letra que se puede observar, se ha encargado de adornar la zona de O Regueiriño y de la estación de autobuses con declaraciones del tipo "Non creo no amor a primeira vista, pero contigo fixen unha excepción", o "Por moi lonxe que esteamos sempre miraremos a mesma lúa", en la Praza Europa. Nada se sabe del autor o autora, salvo que incluso se atrevió con una frase de García Márquez, también en el entorno del citado parking y que, en este caso, sí fue borrada.

VER GALERÍA | Una pintada en defensa del pueblo palestino. // Bernabé/Javier Lalín

Estas declaraciones amorosas a la vista de todos los lalinenses son, quizá, las pintadas más recientes del casco urbano. Por contra, una de las que tiene más solera, con permiso del mural que todos los veranos pintan los niños del campamento en la calle Areal, es la de un callejón que desemboca en Luis González Taboada y que muestra su apoyo al pueblo palestino en su cruzada contra la ocupación israelí. La pintada inicial, adornada con los colores de la bandera palestina, reza "Palestina vencerá. Un holocausto non xustifica outro", a la que se le añadió la palabra Bermés, quién sabe si en franca ironía o para reclamar una mayor dinamización de esta parroquia lalinense.

Hablábamos antes de la nula presencia de amantes del hip hop en Lalín. Sí hay, en cambio, anarquistas que dejan su huella en los espacios urbanos, con pintadas que rezan "Hoy en día solo viven los que tienen dinero en mano" o "Los medios de producción para quien los trabaja. Viva un sistema comunista, abajo el capitalismo". De nuevo, la misma tipografía y el tono rojo, además del símbolo del anarquismo presente en una de las pintadas, -la letra A encerrada en un círculo- permite adivinar que se trata del mismo autor.

Y ya que estamos metidos en política, un paseo por las calles de Lalín también permite adivinar cómo fue, o cómo está yendo, la política a cualquier nivel, pero sobre todo local y estatal. De años pasados y casi como si se tratase de una premonición, en O Regueiriño luce la pintada "Crespo, o concello non é teu", en un mensaje directo al exalcalde de la cabecera comarcal. Hay, también, quien le pide al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, fuerza y paciencia para las negociaciones de cara a formar gobierno, con un directo "Pedro Sánchez aguanta". En verde, y con la silueta de una gaviota, en otra rúa lalinense luce "PPodemos = revisionismo".

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