En el último pleno extraordinario de Silleda, que se celebró el pasado día 18 y en el que se votó la aprobación provisional del PXOM, fue el número tres del PP, Ignacio Maril, quien tomó la palabra para explicar por qué su partido se abstenía de apoyar el documento urbanístico. No era la primera vez que el abogado con despacho en A Bandeira hacía las veces de portavoz, aunque estuviese presente el actual, José Luis Espiño. Ya en la sesión extraordinaria de presupuestos, a finales de noviembre, fue el edil -debutante en este mandato-, y no Espiño, quien defendió la postura de los populares.
El presidente de los populares trasdezanos resta importancia a estos hechos": "Yo quiero que participen todos los concejales en las sesiones plenarias, Me gusta que hablemos todos, porque somos un equipo", afirma Espiño. Pero, a la hora de la práctica, es Maril (Lamela, 1979) el único de los otros cuatro cargos electos que toma la palabra. Estas situaciones no pasaron inadvertidas al resto de actores políticos. El propio alcalde, Manuel Cuiña, hace notar que "resulta cuando menos curioso que en los dos temas más importantes para el funcionamiento del Concello sea Maril, y no Espiño, el que defienda la postura del partido".
Maril fue uno de los principales fichajes en las listas del PP para los comicios municipales del año pasado, junto a otros diez nombres sobre un total de dieciseis. Se estrenó como concejal junto a Natalia Iglesias Méndez (que iba de número 2 en la candidatura) y María del Carmen Folla (número 5). Pero es que, además de cobrar protagonismo en los plenos, Maril se deja ver también con mucha frecuencia en actos instituciones y en actividades sociales o lúdicas de distintas asociaciones. Cierto es que, ya durante la campaña electoral, desde el propio Partido Popular se hizo hincapié en la estrecha vinculación de Maril con colectivos y agrupaciones deportivas del municipio.
Sea como fuere, su cada vez mayor presencia en la actividad cultural e institucional del concello -aunque sea a título personal y sin estar representando a su partido- ha hecho aflorar en parte de la opinión pública en el nombre de Ignacio Maril como valor de futuro y posible candidato del PP a las elecciones locales que tendrán lugar dentro de poco más de tres años. A ello contribuye la escasa presencia en el día a día de Trasdeza de un Espiño que trabaja como bombero en Santiago.
El actual portavoz popular asegura que, en principio, tiene previsto presentarse como alcaldable del PP en 2019. Pero, a decir verdad, el papel que representa este partido como líder de la oposición -y, por tanto, como alternativa al grupo de gobierno- ha flaqueado bastante en los últimos meses. Los populares apenas presentan mociones y, de hacerlo, se ciñen a las mociones de partido.En la práctica, es el único representante del BNG, Matías Rodríguez da Torre, el que aprovecha los plenos bimestrales para hacer un repaso pormenorizado de la política del ejecutivo socialista. Hay que recordar, además, que en las que fueron las primeras elecciones con Espiño a la cabeza de la lista el PP perdió un edil, que ganó el PSOE y que le permite gobernar con mayoría absoluta.
