El barrio lalinense de A Cacharela acogió ayer la celebración de su asamblea anual en la que abordaron distintos temas que afectan al vecindario. Uno de los puntos a tratar era la situación del callejón que comunica la Avenida Bos Aires y la rúa Rosalía de Castro, una zona muy utilizada no solo por los vecinos de ambas calles sino que soporta una notable afluencia de tránsito, sobre todo, los días de feria. Precisamente el Concello concretó que el arreglo del callejón estaba comprometido por el gobierno "desde hacía tiempo" y que el inicio de las obras en este espacio está supeditado a la llegada del buen tiempo por lo que esperan comenzarlas en primavera.
El Concello cuenta ya con un proyecto elaborado por los técnicos municipales que contempla una adecuación integral de este espacio. La actuación incluye la reposición del pavimento de esta zona. También prevé solucionar los problemas causados por una arqueta, además de reducir en algunas partes la inclinación excesiva de los escalones que conforman la escalinata y que ocupa buena parte del tramo a arreglar. Asimismo, el gobierno contempla que esta actuación se lleve a cabo por personal de obras del Concello.
La petición de arreglo de este espacio ya había sido reclamada en varias ocasiones por los vecinos que habían logrado un compromiso de arreglo del mismo ya del anterior gobierno un mes antes de la celebración de las elecciones municipales, quedando pendiente.
En la reunión también se abordaron otros temas del colectivo vecinal como la revisión de las cuentas y la puesta al día de los cobros de las cuotas. En la actualidad la asociación vecinal congrega en torno a 130 asociados y continúa sumando miembros, los últimos en la jornada de ayer. También estaba pendiente someter a debate la convocatoria de elecciones, pero finalmente ante la inexistencia de nuevas candidaturas y dado el respaldo general a la actual directiva no se produjeron modificaciones.
El encuentro sirvió, asimismo, para comenzar a perfilar los preparativos para las citas festivas organizadas en el barrio. Los vecinos optaron por adelantar este año la celebración de la fiesta del socio al mes de mayo, aún sin fijar fecha, para que sirva como antesala para organizar el San Juan, fiesta por excelencia del barrio en el que se implica todo el vecindario. Además, en el calendario también fijan la celebración del magosto. El colectivo continúa así su apuesta por dinamizar el barrio y ofrecer soluciones a los vecinos.
