Ecológico, orgánico, bio... Los profanos en este amplio campo de la alimentación han de ingeniárselas para hablar sin meter la pata. Como denominador común a todos estos términos está el respeto, tanto con la salud como con el medio ambiente. Salvando los matices que existen entre todas estas etiquetas, el caso es que cada vez son más las personas que se apuntan a trasformar sus hábitos alimenticios, buscando otro tipo de productos cuando acuden al mercado. Para muestra, un botón. De la media docena de establecimientos con puesto fijo en el recién inaugurado Novo Mercado de A Estrada, dos son tiendas que ofrecen una amplia selección de productos ecológicos. La segunda de ellas abrió ayer sus puertas ayer mismo.
Sano para el medio ambiente y sano para las personas. Son los motivos que llevaron a Alejandra Godoy a montar La vida verde. El establecimiento ofrece frutas y verduras frescas con garantía ecológica, producidas de forma natural, sin química de por medio. Esta comerciante está convencida de que somos lo que comemos y apunta que cada vez la gente se encuentra más concienciada, si bien reconoce que todavía queda quien se muestra un poco reticente a dar el paso de cambiar sus hábitos de consumo.
Esta es una tienda donde la calidad está avalada por la etiqueta. No se trata tanto de una cuestión de marcas como de que todo llegue respaldado por el correspondiente sello que garantiza que se trata de un producto orgánico cien por cien. La vida verde ofrece desde este puesto del Novo Mercado a sus clientes una amplia selección de pan -centeno, siete cereales, cinco cultivos, espelta, kamut, etcétera- harinas, frutos secos ecológicos a granel, conservas o bebida de arroz, almendra, avena o avellana, por ejemplo . No falta entre esta selección los chocolates con stevia, aptos para que las personas diabéticas puedan disfrutar de este placer. De igual modo, el establecimiento reúne un amplio surtido de productos sin gluten, también de carácter ecológico. En sus neveras pueden encontrarse yogures y quesos elaborados con leche de cabra o de oveja.
En su primer día en el mercado municipal la expectación fue alta, teniendo en cuenta, además, que esta tienda especializada abrió sus puertas en una jornada ferial. Miel, harinas, yogures o leche de cabra fueron de los productos más demandados en este primer día. Con las ganas propias del fecha de inauguración, Alejandra Godoy echó en falta que el mercado no abra también sus puertas por la tarde y que no tenga a diario la afluencia que le es propia los miércoles y sábados.
A pocos metros de esta tienda ecológica se encuentra A Tenda Bio. El establecimiento que regenta Montse Fernández abrió hace unos meses sus puertas en el mercado estradense, enriqueciendo su oferta. Explica su propietaria que el público que consume este tipo de productos "está contento" con que exista oferta en el mercado de proximidad. Reconoce que cada vez son más los estradenses que se animan a introducir cambios en su dieta, buscando que sea la salud la que colme el plato.
Fernández indica que las personas que acuden con frecuencia a su tienda "son puristas". "Quieren productos de primera calidad y saben seleccionar muy bien", explica. En A Tenda Bio no pueden encontrarse productos que lleven aceite de palma, por ejemplo. A mayores, dentro de su amplia oferta, los consumidores habituales tienden a seleccionar artículos sin trigo y buena parte de ellos son, además, vegetarianos. Es por ello que las hamburguesas vegetales tienen un importante tirón entre la clientela del local.
No obstante, el establecimiento también vende carne y embutidos ecológicos. Uno de los productos que oferta es el cerdo celta. En relación a él, Montse Fernández afirma que no hay ningún productor que cuente con el sello ecológico. Sin embargo, destaca que se entiende que estos animales, con una dieta a base de castañas y bellotas y criándose al aire libre, tienen una alimentación totalmente natural. En el caso de los embutidos ecológicos, explica que no existen productores gallegos que los oferten, de manera que estos artículos llegan de otros puntos del país.
Las hortalizas vienen desde mucho más cerca, concretamente desde la huerta que posee la propietaria de esta tienda, avalada por el correspondiente certificado del Consello Regulador de Agricultura Ecolóxica de Galicia (Craega). La fruta las compra a almacenes especializados en este tipo de producción natural. Insiste en que entra dentro de la filosofía de la tienda servir, en la medida de lo posible, un producto local. "De nada sirve que sea ecológico si para traerlo hay que desplazarse 500 o 1.000 kilómetros, con el gasto de carburante que supone", indica.
Montse Fernández llegó a este tipo de alimentación por convicción. A raíz de una consulta, comenzó a introducirlos en su dieta. Al apreciar sus beneficios mudó por completo sus hábitos alimenticios e hizo de esta forma de comer una filosofía de vida. A saúde está na mesa, escribe en su establecimiento. "Esto es algo que despierta dentro de ti", confiesa. Comprobar los resultados prolonga este despertar.
A la hora de explicar los beneficios, apunta que es "un conjunto de muchas cosas", aunque comenta que lo primero que se nota es menos cansancio, en la piel y menos dolores de cabeza, al suprimir los sulfitos de la ingesta diaria. Si se le pregunta qué alimentos suprimiría en primer lugar de una dieta 'común', apunta al azúcar blanco, a los refinados en general, a los aditivos alimentarios y los aceites refinados.
En cuanto al perfil de clientes que se decanta por este tipo de alimentación, indica que se trata de consumidores que comen pocos alimentos procesados, a los que les gusta hacer su propio pan en casa y consumen mucho producto fresco, con una gran presencia de vegetales y frutas, sin olvidar los frutos secos. Además, estos clientes buscan "alimentos íntegros", que cuenten con todas sus propiedades.
Reconoce Fernández que todavía falta mucha cultura en relación a esta alimentación comúnmente etiquetada como saludable. En cuanto a si está al alcance de todos los bolsillos, apunta que los productos frescos sí y otros artículos, caso de las galletas, tienen la alternativa de elaboración casera. En todo caso, señala, todo es cuestión de prioridades.
