La mayoría holgada del PP de Vila de Cruces (tiene 9 de los 13 concejales de la corporación) le permitió sacar adelante el presupuesto de este año, cifrado en 3.739.796 euros, con un límite de gasto no financiero de 3,9 millones. El alcalde, Jesús Otero, insistió en que se trata de un documento "que apuesta por mantener las políticas sociales y que es fruto de la buena gestión de los departamentos". Ello se traduce en que las cuentas aumentan en 315.657 euros con respecto al año pasado, subiendo también las ayudas a deporte y cultura( de 25.800 a 27.000 euros), el número de asociaciones que obtienen subvención o el gasto en protección social (de 210.000 a 263.000 euros).

Sin embargo, desde la oposición el PSOE considera insuficientes los 46.000 euros que se destinan a la Escola de Música Municipal, "pues precisaría por lo menos 60.000", estima el portavoz, Xurxo Guzmán. Señala, además, que los 8.000 euros de ayudas a los ganaderos "son como un parche de morfina a un enfermo terminal. A los ganaderos hay que apoyarlos de otra manera". En este sentido, animó al gobierno a promocionar el polígono de Cumeiro para atraer nuevas empresas, "pues hace poco trascendió que una empresa lechera quería montar una factoría en Deza". El ejecutivo local está a la espera de la aprobación definitiva del Plan de Urbanismo para que este suelo pase a ser industrial.

El BNG, por su parte, echa en falta que el presupuesto no incluya ninguna partida para fomentar el empleo, una cuestión a la que el portavoz del PP, Manuel Souto, respondió con que las políticas directas para dicha promoción ya las realiza la Xunta "y nosotros lo que tenemos que hacer es crear condiciones, mediante actividades culturales y deportivas". Para el líder del Bloque, Xan Blanco, el presupuesto sigue la tendencia de "repartir un poco de dinero en cada parroquia y el resto entre los miembros del gobierno, porque no es normal cobrar 150 euros por una junta que dura 8 minutos". Emplazó al equipo de Otero a sacar a concurso aquellos contratos superiores a 18.000 euros y que duren más de un año. En este tipo se incluyen los de telefonía o luz.

Durante la sesión también se recriminó al ejecutivo local por dedicar el Fondo de Compensación Ambiental a comprar una retroexcavadora y a pagar el canon de Sogama (26.443 euros en ambos casos). El PP entiende que la máquina va a emplearse la mayor parte de los meses y solventará los problemas de cunetas sin limpiar, mientras que Sogama es la única alternativa mientras la Diputación no retome el proyecto de recogida de residuos que había propuesto a los concellos y que al final se quedó sin adjudicatario.

Otra de las obras que criticó el BNG fue la humanización, con 210.000 euros, del Centro do Galo. Se acometerá con cargo al remanente y con la cofinanciación de otras administraciones. Blanco opta por que se le dé una orientación distinta al inmueble, y Otero recalca que es una infraestructura necesaria para las explotaciones avícolas que exportan carne.