El futuro despegue comercial de la céntrica calle Serafín Pazo se está comenzando a fraguar en la actualidad de la mano de inversores privados que prevén llevar a cabo iniciativas de comercio, restauración y oficinas en esta hasta ahora olvidada rúa del corazón de A Estrada. Así lo confirmó el gerente de la promotora estradense Bamarti, Fernando Martínez, enfrascado ahora en el desarrollo de varios de esos proyectos.
El de mayor envergadura sería el de una cadena comercial foránea que ya tiene apalabrada la reserva de 1.380 metros de bajo comercial así como una planta de parking con capacidad para 34 plazas de aparcamiento en el edificio que proyecta construir Bamarti conservando la fachada histórica de la vieja biblioteca, ocupando no solo sobre el viejo solar sobre la que se emplaza esta sino también el adyacente y el que ocupaba la vieja casita en la que hasta hace pocos años tenía radicada su tienda la emblemática joyería Benito Puente.
Pero dado que, en total, el futuro bajo comercial que se hará sobre esos tres solares solo suma 1.100 metros de superficie y la cadena comercial foránea que pretende implantarse ahí necesita 1.380 metros cuadrados, Bamarti ya ha comprometido también con esa firma otros 280 metros de local comercial -también de su propiedad- radicados en el edificio contiguo, el de nueva construcción que erigió en el solar en el que antiguamente estaba radicada la confitería Viena, al lado de la joyería Benito Puente.
En este ámbito, la promotora local aun dispone de otro bajo de 150 metros que también está reservado por otro inversor perode manera condicionada. La promotorai ha acordado con él que si la cadena comercial foránea necesitase más espacio, podría hacerse también con esos 150 metros de espacio adicional. De lo contrario, ese bajo de 150 metros quedaría reservado para el otro inversor.
Según Fernando Martínez, la intención de la cadena comercial -que de momento le pide la máxima reserva acerca del sector al que pertenece- es efectuar las obras en el bajo de manera acompasada a la ejecución de la construcción de las 26 viviendas que llevará a cabo Bamarti. Si bien confía en que la cadena comercial lleve adeñamte su proyecto, por si se frustrase esta operación Bamarti tiene en cartera otro cliente, en este caso otra cadena comercial pero del sector de la alimentación que estaría interesada en asentarse en el inmueble.
Si bien la intención de Bamarti es iniciar las obras de su edificio en mayo y ejecutarlas durante año y medio para que sea una realidad en diciembre de 2017, según Fernando Martínez no habrá que esperar tanto para ver el incipiente despertar de Serafín Pazo. Y es que para otro de sus bajos se está elaborando un proyecto de cervecería con restaurante que tendría capacidad para albergar simultáneamente a 70 clientes. Y en otro de los locales comerciales de la calle se está barajando abrir un comercio de ropa. Ambas iniciativas se convertirían en realidad a lo largo de lo que resta del presente año 2016.
Asimismo, también sería este año cuando comenzarían a habilitarse pisos dedicados a oficinas de alquiler en esta céntrica calle. De hecho, el primer proyecto al respecto ya ha sido presentado hace unos 10 días en el consistorio a fin de obtener licencia municipal para la rehabilitación de un inmueble. Impulsado por su propietario, José Tato, afecta al edificio en cuyo bajo -propiedad de otra estradense- está emplazada la pescadería Chedas. El proyecto de Tato pasa por rehabilitar la fachada e incluso la antigua puerta de madera del inmueble, acondicionando el interior de sus tres plantas para crear un primer piso de 80 metros cuadrados y un dúplex de 130 justo encima, mediante la fusión de la segunda y la tercera planta. También será Bamarti quien ejecute las obras. Según Tato, aunque su intención es destinar ambos pisos a oficinas de alquiler, los dotará de todas las conexiones necesarias para que, en cualquier momento, si es preciso puedan reconvertirse en viviendas. El edificio, protegido por Patrimonio por su proximidad al consistorio, llevará carpintería exterior de madera o de PVC pero con aspecto exterior de madera.
En cuanto al nuevo edificio que creará Bamarti, tendrá su fachada principal hacia la calle Serafín Pazo ya que la promotora pretende encardinar este proyecto en otro global y mucho más ambicioso que, como ya avanzó FARO en enero, conllevaría la peatonalización total de Serafín Pazo para crear una zona urbana comercial -similar a las ya existentes en ciudades como Pontevedra- cuyos edificios acogerían comercios, oficinas y viviendas. Y, de hecho, a ello han ido orientados los contactos que Bamarti mantiene desde hace más de un año con propietarios de la zona y los más recientes efectuados al respecto con el Concello.
