Nueve familias de Lalín recibieron madera talada del Paseo do Pontiñas, espacio en el que el Concello está realizando una actuación de adecuación. El concejal de Benestar, Nicolás González Casares, afirma que tras la donación de esta leña todavía queda madera para al menos otra familia y la concejalía está a la espera de que se produzca alguna petición para que sea atendida. La medida social es para el concejal muy relevante aunque pueda parecer de escasa entidad pues el ayuntamiento facilita a estas familias los recursos y material combustible necesario con el que aclimatar sus hogares durante los meses de más frío.

Las nueve unidades familiares que se beneficiaron de esta donación proceden de siete núcleos rurales distintos y suman 36 miembros, de los que 13 de ellos menores de edad. El departamento de Benestar Social fue el encargado de tramitar las solicitudes. "Aunque la madera pueda parecer un recurso abundante, puede llegar a ser de difícil acceso para muchas personas y queremos ayudar en la medida de lo posible", remarcó el González Casares.