La Consellería de Educación proyecta ejecutar obras en el colegio público San Xoán Bautista de Cerdedo para atajar las graves filtraciones de agua que padece. Así lo explicó el alcalde José Balseiros Guinarte, señalando que, de acuerdo con la previsión que se baraja, los trabajos consistirán, básicamente, en la sustitución de los actuales canalones y bajantes que recogen las aguas pluviales de la cubierta del centro así como en sellar los elementos de la carpintería exterior del edificio para evitar las molestas humedades y filtraciones de las que se queja, con razón, toda la comunidad educativa.En los últimos días, además, el centro sufrió un problema con la calefacción. Se quemó la bomba de circulación de la caldera -que era muy vieja- pero ya se actuó para poner remedio a la situación.

En cuanto a las filtraciones, Educación ha llegado a la conclusión de que cambiando el sistema de drenaje de la caldera y sellando la carpintería exterior del centro -cuando la llegada del buen tiempo lo permita- se acabará con el problema. Y es que, como ya indicó FARO recientemente, personal técnico de la consellería se desplazó en las últimas semanas al centro para comprobar "in situ" que las quejas de padres, directiva del centro y Concello eran acertadas.

Técnicos municipales y de la Xunta escucharon todas las peticiones de la directiva y de la Asociación de Nais e Pais de Alumnos (ANPA) del centro y decidieron dividirlas entre la parte que le correspondía asumir a cada una de ellas.

Tras la elaboración de una memoria valorada, Educación prometió al munícipe habilitar presupuesto y acometer las reparaciones pertinentes para subsanar humedades y filtraciones tan pronto como el tiempo lo permita.

A este respecto, José Balseiros señaló que se ha podido constatar que las humedades en el centro se derivan del inadecuado sistema de drenaje de la cubierta que se instaló cuando se acometió su renovación. Recordó que, desde aquel mismo momento, el Concello siempre expresó su disconformidad con los canalones y los bajantes instalados. "Siempre dijimos que no estaban bien puestos.. Reivindicamos su mejora desde el primer día que se puso la nueva cubierta del colegio", recalcó.

Y es que, según explicó, los bajantes -que no se cambiaron entonces- tenían una capacidad mucho menor que los canalones y, precisamente por ello, eran insuficientes para absorber toda el agua que aquellos recogían. Como consecuencia, los bajantes "reventaron" y el agua, en lugar de deslizarse por su interior, comenzó a caerse por las paredes del centro. Como consecuencia, estas empezaron a sufrir filtraciones.

Asimismo, Balseiros explicó que las ventanas del centro -que "son nuevas" porque también se cambiaron hace pocos años- quedaron mal selladas, lo que contribuyó a empeorar las graves filtraciones que ahora Educación proyecta solventar.

El regidor local confía en que estas medidas sirvan para dejar el colegio en perfectas condiciones porque, explica, en los últimos 8 años se acometieron tres actuaciones muy importantes en el centro: se renovó la cubierta, se instaló nueva carpintería exterior y, además, sse cambió toda la instalación eléctrica, con 65.000 euros.

Cuando las deficiencias en el sistema de drenaje del tejado y el inadecuado sellado de las ventanas comenzaron a traducirse en graves filtraciones, el Concello quiso actuar pero no pudo hacerlo porque esos aspectos exceden su competencia pero informó de lo que estaba ocurriendo.

Asimismo, indicó que desde hace dos años el Concello lleva consignando en sus presupuestos una partida orientada a acometer las mejoras que consideraba pertinentes. Al no ser competencia municipal, le resultó imposible hacerlo. A pesar de todo, José Balseiros destaca que el Concello tiene reservada una partida de 20.000 euros que está dispuesto a aportar si llega a un acuerdo con Educación para colaborar en materia de infraestructuras educativas.

Igualmente, el primer edil de Cerdedo señaló que, de acuerdo con las peticiones trasladadas por directiva y ANPA del centro, el Ayuntamiento ya ha empezado a acometer en fechas recientes obras de mantenimiento que pueden contribuir a subsanar las deficiencias de las que se quejaba la comunidad educativa. Así, por ejemplo, explicó que operarios municipales procedieron a retirar de la entrada del centro una que los padres temían que pudiese desplomarse sobre los niños y repararon el vallado del cierre exterior del recinto educativo. A propósito de esta última actuación, se hizo una parte nueva y se reparó una balaustrada de piedra. "Nuestra parte la estamos ejecutando", aseguró Balseiros, decidido a que los problemas existentes en el colegio pasen a la historia de una vez por todas.