La riqueza natural de Deza y Tabeirós está constatada con la cantidad de espacios verdes y parajes singulares, que dan forma a una comarca del norte de la provincia con atractivos únicos en Galicia. Sus particularidades orográficas y clima muestran un paisaje en el que se mezcla naturaleza propia del bosque autóctono con flora mediterránea y un rico patrimonio fluvial. Una parte de este territorio está en manos de las administraciones locales para uso y disfrute de los ciudadanos.
La cantidad y calidad de los espacios naturales públicos es uno de los parámetros que toma como referencia la Organización Mundial de la Salud (OMS) para sus estudios sobre la calidad de vida de las personas. Así, en los nueve municipios de las comarcas hay más de 67 hectáreas de parques, jardines y áreas naturales de uso público, lo que representa una media de 10 metros cuadrados por habitante. Estos datos constan en el estudio sobre equipamientos municipales que periódicamente realiza el Estado y el último actualizado es reciente, pues data de 2014. Los exactamente 9,9 m2 de media de este tipo de zonas en las comarcas corresponden a las 147 zonas catalogadas en esta encuesta de equipamientos de las administraciones locales. Pero a la hora de analizar caso por caso los nueve territorios se observan notables diferencias en el reparto de estos espacios naturales de titularidad pública, pues hay lugares que fueron desarrollados por los ayuntamientos y ortos por diferentes administraciones supramunicipales.
Si observamos la relación de bienes y su extensión en los distintos concellos, Lalín es claramente el que atesora más patrimonio de este tipo para uso y disfrute de sus ciudadanos. El Estado incluye en su informe sobre la capital dezana exactamente 28 zonas, que ocuparían un total de 409.506 metros cuadrados. Por tanto, con 20,3 m2 por habitante, es claramente el concello con más espacios naturales de todo tipo. En este censo se incluyen parajes muy conocidos como la Carballeira de Quiroga (Catasós) o la de Barcia, que suman 45.680 y 44.196 metros cuadrados respectivamente. El Paseo do Pontiñas aparece en dos epígrafes diferentes; uno de más de 86.000 metros de extensión, y otro, de 30.400. La alameda urbana, las carballeiras distribuidas en varias parroquias, la playa fluvial de Vilatuxe y hasta la Praza da Vila o el parque de Loriga aparecen reflejados en este estudio.
En Silleda constan solamente 7 parques o zonas públicas que totalizan 8.651 metros cuadrados y la de mayor dimensión tiene 2.000. Así las cosas, teniendo en cuenta la población, en Trasdeza estas áreas no alcanzarían ni el metro cuadrado por habitante. En Vila de Cruces son nueve las infraestructuras públicas, que totalizan 13.415 m2. Las de mayor tamaño son una zona verde de 6.050 metros y el área recreativa fluvial de A Carixa. El promedio de áreas naturales por residente en este caso queda en 2,3 metros. Cuatro aparecen en Rodeiro, aunque ninguna sin denominación específica, que suman en 3.332 metros cuadrados, dando como resultado solamente 1,2 por habitante. Un poco más de espacio hay en Agolada, pues, sus 11 instalaciones alcanzan los 6.150 metros cuadrados; o lo que es lo mismo, 2,3 por empadronado. Nueve hay en Dozón, con el recinto ferial de A Gouxa como el más extenso (9.261 m2) y en conjunto totalizar 14.799. Esa cifra eleva a 12,2 m2 las áreas púbicas por vecino.
A Estrada es, con 51 infraestructuras, el concello que más tiene. Pero su extensión (178.702 metros cuadrados) sitúa a la capital estradense con 8,4 m2 de espacios naturales públicos por habitante. Entre ellos destaca el Monte da Capela de Santa María (más de 2 hectáreas), la Carballeira de San Lois (una y media) y las cerca de dos de la Carballeira de Sestelo. En Forcarei son 4.300 metros cuadrados distribuidos en cinco equipamientos, que suponen poco más de un metro cuadrado por vecino. Cerdedo destaca, pese a que su territorio abarca solo 80 kilómetros cuadrados de superficie, pues son 23 las áreas naturales de uso público, que suman 35.844 metros. Este municipio es el segundo de las dos comarcas en espacios por habitante, una vez que se sitúa en 19,2 m2 por cada cercedense.
