La programación cultural de Lalín tiene mañana, a las 21.30 horas, su cita en el Salón Teatro con el espectáculo musical "A caixiña de Balbino" con el que el grupo de baile y música tradicional A Carballeira de Cercio rinde homenaje a Neira Vilas. Se trata de la primera vez que A Carballeira de Cercio realizará una representación en la que el público formará parte activa de la misma tratando de descubrir que contiene la caja del niño más famoso de la literatura gallega contemporánea. La historia discurre después de que el protagonista de Memorias dun neno labrego perdiera una caja enterrada junto a un río después de un rebusque dunha festa. Al igual que Balbino, el protagonista del relato de A Carballeira de Cercio imaginará puede haber dentro de la caja, y propondrá al público jugar a adivinar su contenido. A lo largo del espectáculo, el grupo lalinense interpretará varios bailes de puntos de Galicia como Paderne do Courel, Maneo de Cambre, Jota de Veceáns de Entrimo, Jota de Rebordáns, entre otras danzas autóctonas de nuestra comunidad.

Por otro lado, también el Salón Teatro de Lalín será escenario este sábado, a las 21.30 horas, del estreno del largometraje documental titulado A paixón de María Soliña, de los lalinenses Emilio J. Fernández y Alonso Castaño. La cinta describe el nacimiento, la estructura y la función del tribunal de la Inquisición a través del proceso contra la canguesa María Soliña, a comienzos del XVII. La pretensión es narrar la crónica de estos hechos haciendo hincapié en las motivaciones históricas y sociales ocultas tras las acusaciones de brujería que proliferaron en esa época. La película profundiza mediante ficciones en todos estos hechos, desde la historia de María Soliña hasta la instauración del Tribunal de Santiago de Compostela y el trabajo del inquisidor Alonso de Salazar y Frías. El largometraje de Fernández y Castaño se centra en la figura de María Soliña, que tras el ataque de los corsarios a Cangas fue acusada de practicar brujería y juzgada por la Inquisición en Santiago. Fue condenada a llevar un sambenito durante seis meses y a la confiscación de sus bienes. Después de la condena se le pierde la pista sin ni siquiera saber la fecha y el lugar de su muerte.