La Peña do Porco de Lalín recibió en la tarde de ayer un emotivo homenaje por parte del Cocido en reconocimiento a esta sociedad nacida hace 52 años formada por más de una docena de amigos. El evento contó con la presencia de numeroso público, entre los que se encontraban familiares y amigos de los peñistas, así como autoridades locales como el alcalde de Lalín, Rafael Cuiña, el primer teniente de alcalde, Nicolás González Casares, y la edil de Cultura, Lara Rodríguez. El acto tuvo como principales protagonistas a los tres miembros que todavía conserva aquella sociedad gastronómica pionera, germen de la actual Feira do Cocido: Santiago Seijas Riádigos, Félix Díaz Calviño y Odilo Trabazo. Todos recibieron de manos del regidor municipal un ejemplar un Testiño.

Cuiña inició el turno de intervenciones diciendo que se trataba de un reconocimiento "que de todas formas nunca pagará la enorme contribución que la Peña do Porco le hizo a Lalín". El alcalde señaló que la popularidad que alcanzó Lalín gracias al Cocido quizá nunca fuera posible sin su contribución, y apuntó que con el acto de ayer se dio respuesta a una demanda social, puesto que la peña "no tuvo hasta ahora el reconocimiento institucional que merecía". Tras él, los miembros del colectivo gastronómico relataron algunas anécdotas de los inicios de la peña. Así, Félix Díaz recordó el año en el que invitaron a comer al entonces alcalde Lalín Luis González Taboada, "que tuvo la gran idea de poner en marcha la Feira do Cocido". Santiago Seijas también hizo uso del turno de palabra para destacar los inicios en la antigua taberna Ovella y, también, como cuando tuvo lugar la primera comida oficial de la Feria do Cocido "nosotros quedamos en otro sitio para comer unos huevos fritos". Victorino Gutiérrez Aller, hermano de uno de los fundadores, agradeció a los peñistas la labor realizada desde sus inicios.

El acto concluyó con una animada charla en la que fue inevitable recordar a todos los miembros de la Peña do Porco, fundada en 1964 por los siguientes lalinenses: Salvador González Madriñán, Gonzalo González Batán, Lalito Vidal Peña, Gumersindo López Carballude, Fernando López Jofre, Jesús Bértolo Fernández, Saturnino Gutiérrez Aller, Pablo Fernández Rodríguez, Odilo Trabazo Ferradás, Servando Vidal Peña, Secundino Batán Cacheda, Félix Díaz Calviño y Santiago Seijas Lodeiro. A todos ellos, en la tarde de ayer, el pueblo de Lalín agradeció una iniciativa que significó el nacimiento de una de las grandes señas de identidad de la cabecera comarcal dezana.