El gobierno de A Estrada ha decidido que el Concello mantenga la gestión directa del servicio de recogida de basura. Después de que no fructificase el intento previo de apostar por una recogida provincial a través de la Diputación, el ejecutivo local descarta -al menos de momento- el camino de la privatización de un servicio que arroja déficit al final de cada ejercicio económico. "Hay tiempos para hacer obras y tiempos para mejorar servicios", dijo ayer el alcalde estradense, José López Campos. Lo hizo al anunciar una importante inversión para renovar los medios materiales con que se presta una recogida en estos momentos a todas luces mejorable.

En este 2016 la recogida de basura en el término municipal de A Estrada recibirá una inyección de 450.000 euros, una cuantía que servirá para la adquisición de dos nuevos camiones de recogida y para renovar el parque de contenedores.

Para recoger la basura que los estradenses depositan en los contenedores verdes -residuos orgánicos-, A Estrada dispone de tres vehículos, todos con carga trasera. Dos de estos camiones presentan un considerable deterioro, por lo que serán retirados. En sustitución, el Concello comprará uno con carga lateral para el casco urbano (210.000 euros) y otro con carga trasera (140.000 euros) destinado a la recogida rural, habida cuenta de que existen lugares en la ruta por los que no dará pasado un vehículo de grandes dimensiones.

López explicó que el camión de carga lateral está dotado con un brazo mecánico para contenedores de gran tonelaje. Ello permite que la recogida solo precise de una persona, en este caso el conductor del vehículo. Actualmente el servicio requiere de un conductor y dos operarios.

A mayores, las arcas estradenses destinarán 120.000 euros a la compra de contenedores. En el caso del casco urbano, se procederá a la renovación de los equipos existentes. Sin embargo, en lugar de adquirir contenedores como los actuales, con una capacidad de 800 litros, se colocarán otros de 2.400. Así, frente a los 330 colectores existentes en la actualidad, se precisarán 150 de los de gran capacidad, provistos de pedal para su apertura. Ello permitirá reducir el tamaño de las islas de contenedores y mejorar su estética. En este sentido, el alcalde no tuvo ayer empacho en reconocer que la imagen que proyectan es "lamentable" y que son muchos los ciudadanos que trasladan sus quejas al Concello por el mal estado en que se encuentran estos depósitos, situación que el regidor achacó a años sin un correcto mantenimiento. Los nuevos colectores estarían siempre cerrados, señala López, por su propio mecanismo de apertura. A mayores, anunció un programa de mantenimiento que contempla cuatro limpiezas en profundidad al año.

En cuanto a los contenedores del ámbito rural -el regidor no pudo precisar su número y se limitó a indicar que la cantidad es considerablemente superior que en el casco urbano- para este año también esta prevista una primera fase de renovación, si bien estos colectores conservarán las características de los actuales, con unas dimensiones que se adaptan a las de los camiones de recogida con carga trasera.

"Se dará un cambio a la recogida de basura estético y funcional", declaró el jefe del ejecutivo estradense. Asumió que esta mejora tendrá que limitarse en exclusiva a los medios, aunque no dejó de reconocer la necesidad de que se haga extensiva a los recursos humanos.

Representantes municipales mantuvieron recientemente contactos con responsables de las empresas que se encargan de efectuar la recogida selectiva de plásticos y envases ligeros -el colector amarillo- y del cartón. Desde el Concello se les pidió una renovación de los colectores, en atención a la mejora que el ayuntamiento piensa imprimir al servicio. "Fueron receptivos a valorarlo", apuntó el alcalde.

El recibo se mantiene

Ante el que definió como un "esfuerzo sin precedentes pero más que justificado" para mejorar el servicio de recogida de basura, el alcalde garantizó que el gobierno que preside no piensa subir las tasas que se cobra a los ciudadanos por esta prestación. Reconoció que en el caso del rural esta tasa es, en términos comparativos, baja -la cifró en 36 euros al año- y en que el casco urbano -85 euros anuales- se sitúa en niveles normales.

En cuanto al personal, el alcalde de A Estrada reconoció que el de la recogida de basura continúa siendo un servicio municipal sin personal funcionario adscrito, a excepción de un conductor. De este modo, el ayuntamiento está cubriendo la prestación a través de la contratación eventual de personal mediante programas como los de cooperación. De este modo, el servicio carece de continuidad en materia de personal. Apuntó que ello ayuda a que en épocas de mucho trabajo y coincidentes con períodos vacacionales se produzcan "atascos" en la recogida. Contando con el personal de limpieza de vías, en estos momentos son 12 los trabajadores vinculados al servicio.

Destacó López que la gestión municipal se ve afectada por los problemas para la contratación. Es por ello que, aunque en estos momentos se defiende mantener la gestión directa -A Estrada es uno de los pocos ayuntamientos de su categoría que no ha externalizado el servicio-, no se descarta a futuro, si se mantienen estas restricciones de personal ,"valorar otras alternativas".