La organización del tráfico en el casco urbano de Lalín experimentará, desde el próximo día 7 de enero, variaciones derivadas de la reciente peatonalización de Joaquín Loriga y un tramo de Principal y con la reapertura del Párking Aldea Grande. Afectarán a ocho calles y se justifican por "razones de mayor fluidez del tráfico, mejor funcionalidad y mayor seguridad ciudadana rodada", en palabras del inspector jefe de la Policía Local, Jesús López Cuñarro, que presentó ayer los cambios junto al asesor urbanístico, Javier Bugallo; el alcalde, Rafael Cuiña, y el concejal Francisco Vilariño.

Las rúas D, Rosalía de Castro, Observatorio y su prolongación y Tirabeque pasarán a ser de un único sentido de circulación. En el tramo abierto de Principal y en Wenceslao Calvo Garra se invertirá el actual sentido de la marcha y pasará a ser de subida, como pretendía inicialmente el ejecutivo municipal. "Por lo que vimos en los últimos días, el cruce de los Caballos está muy saturado, sobre todo en las horas punta, y tampoco se ve funcional la actual confluencia de Principal con Matemático Rodríguez", explica Jesús López Cuñarro. En la misma línea, indica que hay gran saturación de tráfico en la calle D, una vía muy comercial que "ganará muchísimo" con el cambio.

Tanto en la calle D como en Rosalía de Castro se mantendrá el estacionamiento únicamente a un lado, con el fin de "permitir una mayor amplitud en la circulación y, al mismo tiempo, facilitar las paradas breves de los vehículos que tengan la necesidad de hacerlo en esas zonas", explica el jefe policial, que elaboró un informe a petición del alcalde. Cuñarro considera que en las esquinas de la rúa Melide con Alcalde Ferreiro sería "conveniente" ampliar las aceras para impedir estacionamientos para facilitar una mejor visibilidad a la salida de vehículos que acceden desde Alcalde Ferreiro a la otra calle. Asimismo, propone ensanchar la acera en la esquina de la rúa D con Calvo Garra, delante de la Panadería da Morena, con idéntico fin de facilitar la visibilidad de salida a los coches.

Javier Bugallo destaca que los cambios se enmarcan en la "tendencia moderna a primar la utilización de la ciudad por las personas, y no tanto por los vehículos". El experto en urbanismo incide en que el proceso busca favorecer el acceso desde el perímetro que forman la circunvalación y la Rolda Leste a otro anillo interior. Los sentidos únicos de circulación facilitan el flujo de tráfico y habilitan espacios peatonales.