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La obra de la traída de agua de Fontao aún está sin entregar a Espina y Delfín

Dos años después de su construcción, la empresa todavía carece de los planos -Los vecinos de la parte baja de la parroquia se ven obligados a consumir agua con arsénico

Obras de la traída de agua para Fontao en Besexos. // Bernabé/J. Lalín

La red de abastecimiento de agua a la zona baja de la parroquia de Fontao está todavía sin recepcionar por parte de la adjudicataria del servicio, la empresa Espina y Delfín. De ahí que, dos años después de su construcción, los vecinos todavía tengan que surtirse de sus pozos particulares, en los que el agua tiene una elevada cantidad de arsénico, o abastecerse con garrafas en otros lugares.

La red de traída de agua se construyó en 2013, mediante una inversión de casi 398.000 euros por parte de la Consellería de Medio Ambiente y después de que en el poblado minero de Fontao se detectase un nivel de arsénico en el agua 40 veces por encima del máximo permitido. Al darse una situación similar en otros puntos de la parroquia como A Brea, Salgueiros o Cruceiro, se decidió variar el proyecto inicial y construir diversos ramales para que, en un futuro, los vecinos pudiesen engancharse a esta red de abastecimiento que proporciona agua desde el casco urbano. En septiembre de 2013, nueve meses después de que se detectase arsénico en el agua y de que el concello solventase el problema con depósitos, comenzó a funcionar la traída para el poblado minero. Esta parte de la obra, que estaba contemplada en el proyecto original, sí fue recepcionada por Espina y Delfín, con lo que pudo ponerse en marcha. Pero no ocurrió lo mismo con la red de traída de la parte baja de la parroquia, en la que según señalan desde Espina y Delfín tampoco se realizaron pruebas de presión. Desde la empresa se ha contactado en más de una ocasión con los concejales para instarles a que solucionen este problema administrativo, pero por el momento no se ha avanzado y los vecinos tienen que seguir consumiendo agua de sus propios pozos, o incluso de las fuentes, que también están afectadas por arsénico y que en la mayoría de los casos carecen de un cartel informativo.

Desde la Alcaldía, sin embargo, Jesús Otero considera que el único impedimento que existe para que todos los vecinos de Fontao estén conectados a la red de la traída es la propia disposición de los residentes. "Los vecinos que lo deseen tienen que solicitar el enganche y pagar las tasas convenientes. Tienen que pedirlo ante Espina y Delfín", señala el alcalde, quien recuerda que se hizo una inversión bastante cuantiosa para solventar un problema que, a todas luces, no se ha despachado del todo.

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