Hay quien la sitúa entre las mejores publicaciones de historia local de España. Cada volumen se presenta puntualmente en los últimos días del año. Todo un best seller para los estradenses y un referente para los muchos investigadores que consultan su repositorio digital, A Estrada Miscelánea Histórica e Cultural presenta esta tarde -a las 20.00 horas en el MOME- el número con el que cumple su mayoría de edad. Han sido 18 ejemplares coordinados por el también director del Museo Manuel Reimóndez Portela, Juan Andrés Fernández Castro. Él se encarga de solicitar o seleccionar los artículos que van configurando, como él mismo dice, el mosaico de la historia local.
-Miscelánea
-Efectivamente, se hace mayor de edad civil pero también se hace mayor de edad como presencia en A Estrada de un anuario que empezó como una experiencia casi personal y llegó donde estamos ahora, que no es poco.
-Durante todo este tiempo ha sido el director, asistiendo al alumbramiento y al crecimiento de una revista que tiene un lugar especial en muchas librerías de A Estrada y que está presente en un elevado número de bibliotecas, dentro y fuera del país.
-Asistí al parto del primer número y dirigí todos y cada uno de los siguientes. Lo hice siempre con mucho gusto y pensando en la trascedencia que puede tener, puesto que quedan por escrito estudios que tiene como denominador común A Estrada, su gente, su cultura. Es una cosa que conviene apreciar en su justo valor porque todos los números están impresos y colocados en el repositorio digital, de manera que hace posible su acceso universal y gratuito. En papel prácticamente se agota en cada una de las ediciones. La edición no es muy grande, 500 o 700 ejemplares, pero la gente lo compra y hemos, por decirlo con un término comercial, fidelizado a nuestros lectores. En cuanto al público se dio cuenta de que esto era una serie que tenía un proyecto de futuro comenzó a coleccionarlo. Y me consta que lo lee.
-¿Cómo surge este proyecto editorial?
-La idea la habíamos gestado Manuel Reimóndez y yo pero no fraguó hasta 1998. Se dieron una serie de circunstancias. Asumí la secretaría del museo y trabajaba mano a mano con Olimpio Arca. Entre los dos decidimos materializar esta ilusión de Manuel Reimóndez. Contactamos con una serie de autores que tenían algunas cosas que decir e hicimos ese primer número de unas 200 páginas. El resto fue saliendo casi solo.
-Al margen del número de páginas, ¿observa alguna diferencia entre aquel número 1 y el 18 que hoy se presenta?
-Sí, evidentemente. Muchas, o al menos unas cuantas. La primera es el diseño. El diseño de los primeros números era un diseño de "andar por casa" que hicimos mi amigo Manolo Castaño y yo. Era un diseño poco profesional. Este es un diseño magnífico. Mejoramos la maquetación. Antes se hacía en la propia imprenta, ahora tenemos una maquetadora profesional que se llama Rosa Costas. En el contenido, más autores, más investigadores se muestran interesados en publicar en nuestra revista. Evidentemente, les mueve el interés científico pero también el tener en su curriculum publicaciones.
-¿Qué tiene que tener un artículo para salir en el "libro azul"?
-La primera es un estándar de calidad. Lo determino yo en primer lugar y después personas del equipo de redacción. En cada caso pedimos asesoría a los miembros del consello consultivo, según sea la materia.En él tenemos personas que abarcan los más variados saberes y disciplinas. Otra de las condiciones que deben cumplir los trabajos es que estén referidos directa o indirectamente a nuestro término municipal o a la tierra de Tabeirós-Terra de Montes. En tercer lugar, la pertinencia: que sean artículos que tengan que ver con la historia, la geografía, prehistoria, etcétera.
-La publicación se ha convertido en un auténtico best seller.
-Sí, el número 1, el 7, el 12, el 14 y el 16 tuvieron mucho éxito. Se agotaron enseguida. No sabemos muy bien por qué. La respuesta habría que buscarla en el contenido de algunos trabajos.
-Hoy se presenta el volumen 18. ¿Cuándo comienza a gestarse el 19?
-Ya está gestado desde hace tres o cuatro meses, puesto que ya tenemos en cartera trabajos que van a formar parte del nuevo volumen, uno concretamente sobre la historia urbana del siglo XIX en A Estrada, otro sobre geografía estradense y algunos otros.
