| Los amigos del silledense Antonio García Frade volvieron a juntarse ayer para compartir mesa y mantel, tal y como lo vienen haciendo desde hace 44 años. Lo que comenzó siendo una comida de bienvenida a un quinto tras el servicio militar es ahora una entrañable reunión, que en el caso de este año admitió por vez primera a las esposas de los comensales. Una treintena de personas se dieron cita en el comedor de la Casa Grande de Fuentemayor para mantener viva una tradición que se inició en septiembre de 1971.