El alcalde de Silleda y responsable de Facenda, Manuel Cuiña, firmó ayer miércoles con representantes del BBVA la operación de tesorería que se renueva en los últimos años para hacer frente a la deuda principal del concello con la empresa Indeza, por valor de 500.000 euros. A día de hoy, todavía quedan por pagar de la operación de tesorería algo más de 300.000 euros de la deuda principal.

Este pasivo se arrastra desde los años 90 y está reconocido por sentencias judiciales. El alcalde recuerda que en agosto de 2008, un año después de la llegada del PSOE al gobierno local, se llegó a un acuerdo con la empresa mediante el que se consiguió rebajar la cuantía de 850.000 euros iniciales a 790.000, incluyendo además la compensación de tasas por el vertedero de escombros de Campomarzo.

Por aquel entonces, el ejecutivo socialista acudió a una operación con el Banco de Crédito Local para pagar el primer plazo acordado, por un importe de 454.091 euros, que correspondían a las obras de la Avenida do Parque. "Pero lamentablemente los gobernantes que entraron en este Concello con la moción de censura se olvidaron del acuerdo y ni pagaron las cuotas acordadas ni reclamaron las tasas del vertedero, con lo que el esfuerzo que hicimos en su día quedó en nada", explica Cuiña. Así es que esta dejadez del gobierno que encabezaba Ofelia Rey desembocó en una nueva demanda judicial, "por lo que ahora el Concello tendrá que hacer frente a otros 560.000 euros de intereses de demora", apunta el regidor.

Indeza acudió de nuevo a los tribunales ante el incumplimiento de este acuerdo al que se había llegado con el PSOE, "en un nuevo caso en el que los intereses superan incluso a las deudas principales por culpa de la irresponsabilidad de algunos gobernantes". Para Cuiña, resulta triste que los vecinos de Trasdeza "aún tengamos que pagar a día de hoy las negligencias que se cometieron, como el abono de esta deuda que a día de hoy ya debía estar liquidada".

Tipo de interés

La operación que ayer se renovó con el BBVA salió a concurso público entre las entidades bancarias. Se contrató en su día con un tipo de interés mínimo, por debajo del medio punto y "en condiciones lo más favorables posible para las arcas municipales", apostilla el primer edil. En los primeros años solo se pudo hacer frente al pago de intereses porque el concello no disponía de la liquidez suficiente. Pero ahora, con esta firma, la deuda que quedó pendiente de 2008 se irá ejecutando con abonos mensuales de 5.000 euros y un tipo de interés ventajoso. De este modo, Silleda abona 60.000 euros al año por el débito contraído con Indeza. Pese a que este desembolso ahora sí puede ser asumido por el Concello gracias a las políticas de contención de gasto que desarrolló en los últimos años, Manuel Cuiña se lamenta de que "la nueva sentencia vuelve a suponer un grave retroceso en el caso Indeza, el único que nos queda por cerrar de la triste herencia de fallos judiciales por impago que fuimos resolviendo en los últimos años".