Operarios municipales iniciaron en la jornada de ayer las obras previstas en el colegio de Rodeiro. La actuación busca hacer frente a un problema de humedades que el centro acusa desde hace tiempo y que evidencian sus fachadas, sobre todo en la zona norte. La actuación consistirá en sustituir parte del revestimiento preexistente del edificio (centrándose en el patio interior y en la zona de acceso) y en cambiar los canalones de la zona del comedor. Las obras cuentan con un presupuesto de 20.000 euros procedentes de una aportación con cargo a la Diputación.

Está previsto que las obras estén rematadas antes de la reanudación de las clases en enero. Aunque apuntan que si queda alguna actuación pendiente será en las zonas donde menos se moleste al alumnado y sin interrumpir el normal funcionamiento del centro escolar.