Tras cinco días los ganaderos decidieron a última hora de la tarde de ayer levantar el bloqueo que mantenían a los hipermercados de la firma Lidl entre los que se encontraba el situado en el Centro Comercial Deza, en Lalín. Las negociaciones mantenidas en A Coruña por los ganaderos con representantes de la empresa dejaron sobre la mesa un principio de acuerdo en el que la firma se compromete a subir el precio de la leche para garantizar cubrir los costes de producción. También "hay buena voluntad" para identificar el origen de la leche y que el consumidor sepa que es 100% leche gallega y no solo envasada en Galicia.

Ante este principio de acuerdo los ganaderos decidieron levantar el bloqueo al abastecimiento de su hipermercados. Pero eso no significa el fin de las protestas. En Lalín los productores dejaron los tractores aparcados aún en la explanada del centro comercial a la espera de los pasos que llevan a cabo en los próximos días. Están pendientes tanto de las decisiones que adoptarán en las asambleas que realizan cada día como para coordinarse con el resto de ganaderos que realizan acciones en el resto de Galicia. "De momento no nos marchamos estamos a la espera", explicaba ayer por la tarde el secretario comarcal de Unións Agrarias y ganadero, Román Santalla.

Además, los ganaderos abren también una nueva vía para intentar un precio digno para la leche que producen. Reclaman que también se emplee leche 100% gallega para la elaboración de los quesos y que se identifique el origen en la propia etiqueta de los quesos. Reconocen que es indispensable la implicación de la consellería de Medio Rural en estas medias pero están comenzando también a negociar con las distribuidoras estas exigencias. La identificación y el empleo de leche 100% gallega es clave para los ganaderos así como la identificación de la procedencia de toda la leche para que el consumidor elija y sepa que está adquiriendo.

También en la jornada de ayer, Lidl ponía sobre la mesa la posibilidad de contar con una marca de leche ecológica. Una medida que desde Lalín respaldaron y que consideraron también muy interesante.

Las asambleas mantenidas periódicamente a lo largo de estos cinco días ponen también de manifiesto las dudas que los productores tienen sobre los verdaderos culpables de que el incremento del precio de la leche que sufrió el consumidor no se haya trasladado a los productores. "Las culpas las ha llevado la distribución pero la industria también tiene parte", de ahí que para los ganaderos cobren vital importancia estos principios de acuerdo para garantizar un precio que cubra costes porque así sabrán quienes incumplen.