Santiago Navaza propietario de la quesería O Balido se mostraba "muy agradecido y muy sorprendido de recibir este reconocimiento con el poco tiempo que llevamos". El proyecto surgió hace ya dos años pero a penas lleva comercializando el producto nueve meses. Si bien su reciente participación en un concurso mundial de quesos ha incrementado en los últimos meses la demanda e intuye que el premio puede traerle también estas consecuencias para su quesería. "Supongo que ahora con este premio también se incrementará hasta el punto de que ahora estamos ya sin stock de producto y empezaremos ya a tener pedidos en cola", apunta. Explica que "el queso está gustando mucho y me llaman de distintos puntos de Galicia para interesarse por él".
O Balido contaba con una producción en entre 120 y 180 kilos quincenales o mensuales dependiendo de la producción de la leche de oveja. "Anualmente tiene una producción muy variante, no es lo mismo su rendimiento en verano que invierno" apunta.
El productor destaca que sus quesos están despertando gran interés por el método de curación, con los vientos del Candán y en una casa de piedra situada en el lugar de Piñoi, Vilatuxe. "La primera diferencia de nuestros quesos nace del pasto verde que comen las ovejas a diferencia del pasto seco de Castilla y la segunda es la curación natural en una casa de piedra. Así tenemos un queso, que a pesar de sus meses de curación, no termina de ponerse duro, algo nuevo, algo distinto". Defiende que han logrado "dar una vuelta de tuerca" con esta curación en casa de piedra, como las antiguas bodegas, una piedra que incluso imprime su seña al producto.
El premio significa también un impulso para continuar su proyecto hasta poder ofrecer al consumidor un acercamiento total al producto con visitas a la quesería y "ser quesero por un día".
