La Diócesis de Lugo gestiona en estos días los últimos trámites para poder iniciar las obras de restauración previstas en el santuario de O Corpiño (Lalín). En concreto, están pendientes de tramitar con el departamento de Urbanismo del Concello de Lalín esta gestión para poder obtener las licencias pertinentes. El proyecto se expondrá al público en próximos días y se abrirá así el período de alegaciones previo a su resolución y a dar luz verde a la rehabilitación contemplada en el interior del templo mariano.

Desde el Concello explican que esta tramitación es más tediosa de lo habitual y la demora se debe a que el santuario se asienta en terreno rústico por lo que debe ser la Xunta quien evalúe tanto el proyecto como las posibles alegaciones que se contemplen al mismo, previas a que el Concello pueda conceder la licencia de obra. La rehabilitación se centra en la recuperación estructural y geométrica de la bóveda de arista y el arco contiguo de la iglesia. La actuación se contempló al descubrir que las dovelas de dicho arco se habían desplazado por lo que se tratará de devolverlas a la posición original. El proyecto matiza que no se contempla ni el aumento de la superficie ni el volumen de la edificación. En concreto, la superficie construida abarca 806 metros cuadrados de los 10.256 que dispone la parcela en la que se sitúa el santuario.

El rector del santuario, José Criado, explicaba que esta rehabilitación se contempló al plantear la restauración del retablo principal. "Fue cuando nos dimos cuenta que se habían desplazado algunas de las dovelas y decidimos realizar toda la actuación conjunta, primero tratar el arco y luego restaurar las pinturas". La actuación comprende también el tratamiento de todas las imágenes y pinturas murales ocultas por el humo de las velas de épocas pasadas. El Obispado dispone ya del permiso de Patrimonio para realizar la restauración. "Estuvieron durante una jornada tanto el director de Patrimonio como una técnica evaluando el proyecto de restauración para conceder la autorización", apunta Criado. Luego será una firma de restauradores profesionales los que se encarguen de realizar las labores. Criado contempla que los trabajes comiencen a mediados de enero.