El Concello de A Estrada cuenta con la experiencia, vivida el pasado verano, de una comedor de verano para los niños de familias que atraviesan una situación económicamente difícil. Esta atención estaba prevista para cubrir las necesidades de entre 20 y 25 familias estradenses. Sin embargo, Goldar reconoció ayer que no acudieron muchos usuarios al servicio.