La junta de gobierno de Lalín aprobó el informe del ingeniero técnico municipal relativo al reconocimiento de una explotación de visiones en el lugar de O Carrio, en la parroquia de Val. En el expediente consta asimismo que la sociedad Visóns do Carrio abonó 261 euros por esta licencia. La empresa ya había pedido a finales de marzo del año pasado autorización para la colocación de una eléctrica y ya disponía de autorización preceptiva para continuar con el proceso de cría con cargo a la normativa vigente.

Para muchos vecinos desconocida, esta granja comenzó su actividad en 1989 y el negocio fue recuperado, ya con sus actuales propietarios, hace unos tres años. En estas dependencias hay en torno a 300 hembras. "Es una explotación pequeña comparada con las otras que hay en Galicia", dicen sus dueños, quienes concretan que disponen de una producción estimada de unas 1.200 crías de este mamífero al año. Sus dueños explican que, como otras granjas, crían estos animales por el preciado valor de su piel. En este caso la puesta en marcha de la peletera en el recinto ferial de Silleda -Agapel Pelting- supone una sinergia pues a sus instalaciones se llevan los ejemplares sacrificados. Allí se realiza un proceso industrial para dejar estas pieles en estado idóneo para su posterior comercialización o subasta. En el caso de esta explotación de Val do Carrio su mercado está mayormente en Dinamarca. En este país del norte de Europa existe también un mercado de subastas importante.