El grupo de gobierno lalinense donará una parte de la madera extraída de las tareas de saneamiento del Paseo do Pontiñas a familias en situación de exclusión social. La medida tiene como principal objetivo facilitarles a estas unidades familiares que carecen de recursos suficientes una partida de material combustible con el que poder aclimatar sus viviendas en los meses más fríos del año.
El anuncio fue realizado ayer por los concejales de Benestar Social (Nicolás González Casares) y Medio Ambiente (Celia Alonso). Son los técnicos del departamento de Benestar Social los encargados de llevar a cabo el procedimiento de selección de las entidades familiares beneficiarias. La madera que será entregada a los vecinos pertenece a las más de un centenar de árboles que actualmente están siendo retiradas de este espacio natural. Además del saneamiento del Pontiñas, esta acción tiene que ver con la propuesta del área municipal de Medio Ambiente de eliminar aquellos árboles que por su mal estado suponen un peligro potencial para los muchos ciudadanos que a diario acuden al sendero fluvial. Casares comenta que aunque la madera para la calefacción puede parecer un recurso abundante, en realidad son muchas las familias que pueden tener difícil acceso. "Desde el grupo de gobierno queremos contribuir en la medida de lo posible a que nadie pase frío durante el invierno", manifiesta González Casares.
Por otro lado, la leña que no se entregue a estas familias sin recursos será puesta a disposición de la ciudadanía que desee llevársela para su casa. Esto mismo se hizo con los centenares de cañas de bambú que fueron cortadas en distintas zonas del paseo. Parte de ellas están acumuladas en las instalaciones del mercado de ganado para repartir entre las personas que las quieran. Otras, según indicó Celia Alonso días atrás, podrían ser recuperadas como elemento de ornato en distintos espacios públicos.
