El Concello de Lalín solicita al Ministerio de Fomento la cesión de las casas de los camineros de Donramiro y de la que ocupaba el jefe de la estación de Botos, así como las escombreras creadas durante la construcción de la vía del Tren de Alta Velocidad (TAV) en el municipio. El regidor local, Rafael Cuiña Aparicio, mantuvo ayer en Madrid una reunión con la jefa del área de seguimiento y concertación de la Subdirección de Desarrollos Inmobiliarios y Obras del Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), Sagrario Peraleda Díaz, y le trasladó la petición de traspaso de estas propiedades a la Administración municipal para destinarlas a usos públicos y de carácter social.

Las casas de los camineros son cuatro bloques de viviendas situadas en la Avenida de Donramiro, muy cerca del cruce que va al cementerio de A Romea. Xunta y Fomento se dividen la titularidad de las viviendas a partes iguales, pues cada organismo dispone de dos bloques de seis pisos. Solo cinco de los 24 pisos que conforman la urbanización están habitados; los demás llevan años desocupados. Por este motivo, tras realizar una valoración de la situación actual de los inmuebles, el gobierno lalinense ha decidido realizar la solicitud de traspaso, algo que ya había hecho infructuosamente el gabinete presidido por José Crespo Iglesias. El estado de los inmuebles requiere de "una considerable rehabilitación", tal como explica Cuiña. Basta echar un vistazo a sus fachadas para ver que reclaman una rehabilitación urgente. La falta de mantenimiento por parte de los organismos públicos a lo largo de estos años provoca que sea fácil encontrar descorchones en cornisas y balcones o maderas desgastadas en ventanales, contraventanas o puertas. El uso que se le dará a estas edificaciones en caso de recibir una respuesta afirmativa del ministerio está todavía por determinar, aunque todo apunta a que "un buen proyecto" para las mismas sería el de dedicarlas "a fines sociales", apostilla.

Con este mismo objetivo, el Concello solicita al Adif la cesión de la edificación destinada a vivienda que posee en la estación de tren de Botos. En este caso, se trata del edificio que en su día ocupaba el jefe de la estación, pues otras casas de antiguos trabajadores del ferrocarril ya fueron comercializadas en su día y llevan años habitadas.

En cuanto a las escombreras, creadas durante las obras de la línea del TAV, hoy en día carecen de utilidad alguna para el Estado. Por lo tanto, el alcalde, como ya había hecho su predecesor y como él mismo había explicado a la ministra Ana Pastor, volvió a solicitar su cesión por un precio simbólico para que el Concello de Lalín pueda actuar en ellas y emplearlas para lo que considere más oportuno.